Atlético de Madrid
Toman medidas para que el Frente no esté en San Mamés
El Frente Atlético no ha entrado como grupo organizado en San Mamés desde 2009. En alguna ocasión, ha viajado en autobús y no se le ha permitido el acceso al recinto.
El Athletic, en colaboración con la Ertzaintza, ha extremado las medidas de seguridad para evitar la presencia de componentes del Frente Atlético en Bilbao y haya enfrentamientos entre ambas aficiones. La primera decisión fue no vender entradas al club colchonero, que sólo dispondrá de 110 invitaciones de una tribuna lateral. Después, se impidió la compra de billetes por Internet y cajeros, por lo que únicamente se dispensan localidades por ventanilla hasta agotarse con un máximo de cuatro por persona y precios que van de 40 a 110 euros.
No hay constancia de que puedan presentarse en San Mamés seguidores del Frente, aunque se seguirá el hilo para investigar si alguna de esas invitaciones, cuyo bloque principal corresponde a los futbolistas, pudiera caer en manos de radicales.
El Frente Atlético no ha entrado como grupo organizado en San Mamés desde 2009. En alguna ocasión, ha viajado en autobús y no se le ha permitido el acceso al recinto.
Ya se sabe que la relación entre Herri Norte y ese colectivo es muy tensa. También, que irrita a la grada la presencia en el banquillo rival de Diego Simeone, a quien no se perdona que lesionase en su día a Julen Guerrero. La cita es el primer gran examen para los seguidores de los fondos bilbaínos, que no podrán lanzar perlas contra él. Se ha advertido a los grupos de animación que la Ertzaintza será inflexible e identificará y abrirá expediente a quien cruce la raya e insulte. Empezó contra el Alcoyano.
Pese a que sorprendentemente el partido no ha sido calificado de Alto Riesgo, incrementarán el número de agentes desde primera hora de la tarde para evitar enfrentamientos.
Más expedientes. La Ertzaintza mantiene abierta la investigación para identificar a otros posibles autores de los cánticos en un grupo reducido de “¡Policía, asesina!” en el partido de Copa, por los cuales ya ha sido identificado como uno de los responsables de estos insultos un vecino de Mungia de 31 años. Al parecer, la Policía ya manejaría una serie de nombres de aficionados que esquivaron el control por las puertas de la Tribuna Sur para abrir más expedientes.
El caso se ha trasladado vía Ley del Deporte. La multa económica para el implicado puede ser de hasta 3.000 euros.