Goles de despacho

Goles de despacho

El Atlético está en el buen camino. Los Gil han aprendido de sus errores y este año parecen tocados por la varita mágica de los aciertos. Primero, con la contratación de Luis Aragonés como jefe en el área deportiva, decisión que fue consensuada por Futre y Gil Marín. Posteriormente, con los nombramientos de Ignacio Ayuso y Alberto Rodríguez, que tienen una lectura mucho más importante que lo que dice el nombre de sus cargos.

Los rojiblancos saben que es necesario un cambio de imagen. Con Ignacio Ayuso dejarán de ser los niños rebeldes de la Federación, ya que el nuevo director general de Gerencia Atlética es íntimo amigo de Gerardo González. El embajador adecuado para abrir nuevos caminos en todos los organismos importantes del fútbol español y europeo. Sin olvidar su afinidad al Partido Popular, ya que en su etapa del Consejo Superior de Deportes fue la mano derecha de gente tan relevante como Pedro Antonio Martín Marín o Santiago Fisas.

Alberto Rodríguez va a permitir que el Atlético tenga acceso a la Moncloa. El profesor de pádel de Aznar podrá equilibrar un poco la balanza en los sentimientos madridistas del presidente del Gobierno. Y el palco del Calderón podrá convertirse en un centro neurálgico de la gente guapa e importante que domina en la actualidad nuestro país, como sucede en el Bernabéu.