El Madrid arranca con victoria en Podgorica

Euroliga | Buducnost 72 - Real Madrid 82

El Madrid arranca con victoria en Podgorica

El Madrid arranca con victoria en Podgorica

AP

Djorjevic, Tarlac y Vukcevic, ovacionados por el público.

Les presento a un claro aspirante a la Euroliga, el Real Madrid, equipo con hechuras y solvente. Le falta acoplamiento, pero funciona. A veces con casta, otras con calidad. Ayer se deshizo sin agobios del campeón yugoslavo, el Buducnost: 72-82. Para Scariolo han cambiado las cosas. Sus pívots le permiten dormir tranquilo. Ya no le ata la inspiración de sus hombres exteriores, aunque seguirán ganando partidos.

De inicio, Tabak frenaba a la nueva estrella local, Jestratijevic -sustituto pobre de Tomasevic-, y junto a Struelens formaba una muralla infranqueable. Al croata le pitaron, le gritaron; claro, estaba en Montenegro, Yugoslavia, territorio hostil. El perímetro blanco hacía el resto. Entre Alberto Angulo, Djordjevic y Vukcevic anotaban 19 puntos en el primer cuarto (17-25). Atinada pincelada de lo que podía ser el partido.

Luego llegó Tarlac, que puso la luz en el apagón ofensivo madridista. Sumaba 12 tantos bajo el aro en 17 minutos. Pero ahí, en los tableros, se veía lastrado el Madrid. El Buducnost se hartó de atrapar rechaces ofensivos y de lograr canastas fáciles. Recortó una ventaja de 13 puntos al inicio del tercer periodo (31-44) y le echó el aliento al Madrid en el cogote. No había nervios, todo bajo control. Los blancos mostraron suficiencia.

Había aparecido otra vez Djordjevic (qué grande) y Vukcevic -en su mejor partido hasta ahora-, y daba la puntilla a los montenegrinos con un triple desde nueve metros sobre la bocina del tercer periodo: 51-61. Al Buducnost no le quedaban recursos para la gesta, ya que Kuzmanovic guerreaba en solitario. Djordjevic, Tarlac y Vukcevic salían por la puerta grande, ovacionados, en su visita a su tierra, Yugoslavia.