Demasiadas expectativas

Demasiadas expectativas

Dice Solans, en un claro reproche al entorno, que se está dando la impresión de que las cosas están mucho peor de lo que están, que hay mucho de fatalismo aragonés en el balance de situación del Zaragoza. Y el presidente afirma todo eso cuando él mismo ha desaparecido de la diana, cuando la elevada inversión en fichajes (4.150 millones) le ha puesto a salvo de la crítica y de la pañolada. "Este año (afirma preocupado) le toca a Rojo". El futuro del técnico no está a debate. Y así lo ha dejado claro Solans. Pero la situación puede volverse insostenible si no se aprueban con autoridad las finales contra el Málaga y el Servette. Se ha valorado poco que el técnico optara por el Zaragoza cuando tenía al Valencia y al Mallorca esperando, pero Chechu también está obligado a rebajar el clima de ansiedad y a reducir la tensión, porque hay muchos que llevan tiempo con el dedo en el gatillo.

El clima no es el mejor para unir voluntades, porque el zaragocismo está muy sensibilizado y un sector del público no le perdona una a Rojo, pero el técnico ya vivió una experiencia similar en su primera etapa y supo salir adelante. Quizá el problema es que se levantaron unas expectativas enormes tras la conquista de la Copa y nadie recuerda que quince días antes el equipo estuvo cerca de bajar a Segunda. También se olvida que el Zaragoza ha estado sin Drulic y Acuña, los dos futbolistas más decisivos.