Los corredores españoles son los mejores de Europa. Así lo demuestra un estudio hecho por este periódico con base en los 20 primeros atletas del ránking mundial 2001, cuya temporada acaba de terminar oficialmente. Sólo corren más que los españoles Kenia, Estados Unidos y Etiopía, por este orden y, en este último caso, por muy poca ventaja.

Como no hay nadie perfecto, así que cada país cede en alguna especialidad. Así, los kenianos y los etíopes no existen en velocidad y vallas y los norteamericanos son invisibles a partir de los 400 metros. España basa su poderío en las pruebas comprendidas entre los 1.500 metros y el maratón. En ellas, sólo cede ante los corredores africanos.

¿Y el resto de países europeos? Gran Bretaña es el escudero de España, porque tiene buenos velocistas y vallistas, pero en mediofondo y fondo está en un pozo. ¡Qué atrás quedan ya los tiempos de Coe, Ovett y Cram! Francia se encuentra aún más atrás y basa parte de su poder en inmigrantes o hijos de inmigrantes magrebíes que han invadido su selección. Y ya a años luz Polonia, Italia, Alemania...

¿Quiénes son los héroes españoles? Ahí están el catalán José Ríos y el madrileño Luis Miguel Martín Berlanas en 10.000 y 3.000 metros obstáculos, líderes europeos. Y el valenciano José Antonio Redolat (1.500), los también madrileños Alberto García (5.000) y Fabián Roncero (10.000) y el balear Toni Peña (maratón), segundos. Y el toledano Julio Rey y el sevillano Antonio Jiménez, terceros en maratón y obstáculos. Nunca España había brillado tanto.