En el palco sufre y disfruta sin inmutarse

Primera | Real Madrid

En el palco sufre y disfruta sin inmutarse

Minutos antes de comenzar los partidos, a Florentino Pérez le gusta observar, es una forma de seguir aprendiendo, de ver qué se puede mejorar. Se fija en los que tiene cerca, pero no pierde detalle de lo que pasa en la grada. Quizá su cargo, el de presidente, le haga disfrutar menos del partido o, al menos, siempre tiene que mantener la compostura. Si el Madrid gana se mantiene serio por respeto al rival. Si pierde, es cuando sonríe. La procesión va por dentro. Cuando comienza un partido y coge el balón Figo, Zidane o Raúl. Ante una filigrana de uno de los cracks, el Bernabéu se queda mudo, los 75.000 espectadores disfrutan del momento y sólo se escucha: "¡Oooohhhhhhhh!". Con esa única exclamación, algo tan sencillo como eso, Florentino disfruta como si hubiera ganado una final.