Austria niega sus casos de dopaje

Salt Lake 2002 | Dopaje

Austria niega sus casos de dopaje

La federación de ese país anuncia una investigación.

La Federación Austríaca de Esquí (OeSV) ha rechazado las presunciones de posible dopaje de sus esquiadores de fondo y biatletas en los recientes Juegos Olímpicos de Invierno de Salt Lake City, tras ser hallados en una vivienda utilizada por su equipo en EEUU aparatos para transfusiones y bolsas de sangre vacías.

En un comunicado difundido la pasada noche, la OeSV anuncia, sin embargo, la apertura de una investigación interna sobre el caso, después de que el Comité Olímpico Internacional comunicase este jueves que investiga a su vez el posible caso de dopaje de miembros de la delegación austríaca.

"Todos los datos obtenidos hasta el momento no ofrecen indicio alguno de la utilización de productos o la aplicación de terapias prohibidas", señala la nota difundida por la Federación Austríaca de Esquí.

El escándalo surgió cuando los propietarios de la vivienda en cuestión, situada en Midway, junto a Soldier Hollow, denunciaron que al hacer la limpieza de la misma habían descubierto aparatos para realizar transfusiones, así como bolsas vacías de sangre.

En una primera reacción, Walter Mayer, director nórdico del OeSV para biatlón y esquí de fondo, calificó el hallazgo de "nada trágico. Puede tratarse quizás de nuestros aparatos de infusión. Los utilizamos para distintas terapias, pero eso no tiene nada que ver con productos prohibidos".

En declaraciones a la emisora pública ORF, Mayer comentó recordar que aquellas cosas que ya no necesitaban fueron tiradas a una bolsa de basura, pero "no había nada prohibido. Eran cosas para tratamientos de ozono y ultravioleta o infusiones de glucosa".

Por su parte, el presidente del Comité Olímpico Austríaco, Leo Wallner, comentó su esperanza de que "se trate de aparatos para tratamientos después de la competición, para inyectar revitalizadores. En todo caso investigaremos lo sucedido y hablaremos con los médicos".

En la vivienda donde fueron hallados los objetos sospechosos se hospedaron durante los Juegos el director del equipo nórdico, Walter Mayer, así como el biatleta Wolfgang Rottmann y los esquiadores de fondo Christian Hoffmann, Mijail Botvinov, plata y bronce respectivamente en la prueba olímpica de 30 kilómetros estilo libre que ganó Muehlegg, además de Gerhard Urain, Alexander Marent y Marc Mayer.

El Comité Olímpico Internacional ha condenado reiteradamente las transfusiones de sangre como método para obtener mejores marcas por considerarlo una práctica poco ética a la vez que extremadamente peligrosa para la salud.