La del Zaragoza en El Saler no es una concentración normal. Es un cambio de escenario en busca de una calma imposible porque, por dentro, tanto la plantilla como sus técnicos y el propio club tratan estos días de invalidar los nervios que provoca la consideración de los efectos de una nueva derrota, que significaría el descenso casi inmediato.
El escenario que se prepara el domingo en El Madrigal es terrible: dos equipos con una brutal exigencia. El de casa, apenas algo más desahogado; y absolutamente desesperado el otro, el Zaragoza.
El duelo, pues, requiere una fortaleza mental enorme, que el Zaragoza trata de reunir estos días en sus leves jornadas de trabajo. Ayer Marcos Alonso volvió a ordenar dos sesiones muy suaves: apenas una hora alcanzó la primera de ellas, y hora y cuarto justa la segunda. El técnico sigue teniendo muchas dudas en algunos puestos determinados. Martín Vellisca tiene muchas opciones de jugar, sobre todo después de la sesión vespertina de ayer, en la que el Zaragoza jugó un partidillo. El madrileño entraría atrás o en el medio. Si lo hace en esta última posición, sería Pablo el lateral derecho.
Muchas indecisiones. Unas molestias en la espalda de Ander Garitano abren también una puerta a Corona, que puede terminar siendo titular. Y Generelo cuenta con muchos números para integrar la convocatoria. De cualquier modo, Marcos sigue sin enseñar todas sus cartas: un poco por indecisión y un mucho, también, por la proximidad geográfica del rival. El partido no permite deslices, en ningún aspecto.
Habrá 600 maños en Villarreal
Se da prácticamente por hecho que el Zaragoza no devolverá ni una sola de las casi 600 entradas facilitadas por el Villarreal para el encuentro del próximo domingo. La federación de peñas está a punto de completar el sexto autobús, mientras que el Colectivo 1932 y el Ligallo Fondo Norte, que organizan sus viajes de forma independiente, podrían llenar cuatro entre ambas agrupaciones. El viaje cuesta 12 euros, el valor de la entrada, ya que el Zaragoza se ha hecho cargo de los gastos del desplazamiento de los aficionados que viajan el domingo.
