El Rangers lo quiso, pero se quedó por una lesión de rodilla

El Rangers lo quiso, pero se quedó por una lesión de rodilla

Los aficionados del Espanyol están acostumbrados a ver cómo su estrella flirtea con una posible salida. En septiembre de 2000, después de que Tamudo hiciera unos Juegos Olímpicos muy buenos en Sydney, el Glasgow Rangers decidió contratarlo. En el aeropuerto de El Prat, cuando fue a coger el avión, no pudo aguantar la emoción y lloró. Tamudo es un jugador criado en el Espanyol y le costaba hacerse la idea de que ya no vestiría más de blanquiazul. Pero el destino le guardaba una sorpresa: los médicos del club escocés le detectaron una inexistente lesión de rodilla y finalmente se quedó.