Jan Ullrich rechazó pedir contraanálisis tras dar positivo en un control por consumo de éxtasis. "Eso significa que acepto el resultado positivo del primer análisis", dijo Ullrich, que admitió haber tomado dos pastillas de éxtasis la noche anterior al control (12 de junio). "Fue una gran idiotez, es imperdonable y asumo toda la responsabilidad", añadió el ciclista en una rueda de prensa celebrada ayer en Francfort.

El campeón alemán matizó que no se trata "de un asunto de dopaje". "Nunca he tomado sustancias prohibidas para intentar mejorar mis resultados. Había bebido y me dieron dos píldoras, cuya naturaleza ignoraba. No pagué nada por ellas. Mi prioridad es volver de nuevo", dijo Ullrich, que se enfrenta a una suspensión de entre 6 y 12 meses.

La Fiscalía de Múnich abrió ayer una investigación judicial contra Ullrich por haber "infringido la ley sobre estupefacientes". "Está claro que ha consumido sustancias prohibidas y es una razón de peso para abrir un proceso", declaró el fiscal Eduard Mayera.

No obstante, el Telecom ha anunciado que ayudará a su corredor. "Gracias a él hemos tenido momentos gloriosos y es también nuestro papel ayudarlo en los momentos difíciles para que pueda superarlos".