Paradas Romero la armó en La Romareda

Segunda | Zaragoza 2- Racing de Ferrol 2

Paradas Romero la armó en La Romareda

Paradas Romero la armó en La Romareda

JAIME BELVER

Señaló tres penaltis rigurosos y el Zaragoza volvió a fallar.

El Zaragoza volvió a dar otro paso en falso. Esta vez en La Romareda. En un partido extraño, con una calamitosa actuación arbitral, el equipo de Paco Flores no supo rematar al Racing de Ferrol cuando lo tuvo de rodillas y acabó pagando muy caro su perdón.

Flores continúa sin dar con su mejor once, pero con Cani y Soriano en el campo el Zaragoza de la primera parte fue de lo mejor de esta temporada. Y eso que desde el principio apareció el árbitro para poner piedras en su camino. En el minuto 6, Paradas Romero anuló de forma incomprensible un gol a Toledo cuando Drulic se encontraba saliendo del fuera de juego.

Pero enseguida llegó el primer gol. Un centro largo de Ferrón que peinó Juanele y Drulic, en carrera, se incrustó entre la defensa del Racing para definir al palo izquierdo. A partir de ahí, el Zaragoza se soltó al mismo ritmo que el conjunto gallego se iba encogiendo. Sin embargo, los visitantes no tardarían en empatar. En su única aproximación al área, el árbitro consideró penalti una acción de juego peligroso dentro del área de Ferrón. Pareció libre indirecto, pero Paradas no se lo pensó. Tiró Samir, paró Láinez y Cuéllar, atento a la jugada, remachó el empate.

Ocasiones perdidas

El partido volvió a abrirse, pero de nuevo apareció el árbitro. Íñigo empujó levemente a Drulic y la jugada acabó en penalti. Faltaban tres minutos para el descanso y Soriano puso el 2-1. De ahí al final de la primera parte, el conjunto maño desperdició dos clarísimas ocasiones de gol, especialmente la primera de Cani, que se entretuvo después de haber hecho lo más difícil y dio tiempo al portero a reaccionar.

El árbitro acrecentó su particular show tras el descanso. Primero le perdonó la expulsión a Egoitz y, después, ignoró un claro penalti de Íñigo a Drulic. El único que lo fue, no lo señaló. El Zaragoza empezó a enredarse en sus dudas de siempre, pero el Racing de Ferrol no tenía pegada suficiente para irse arriba. Pero otra aproximación visitante acabó, como no, en penalti. Y otra vez muy riguroso. Lo tiró David Pérez y logró empatar.

A partir de entonces, el Racing se fue hacia arriba y pudo incluso haber ganado el partido: Manel disparó al poste y Pezzarossi, a punto estuvo de provocar la gran sorpresa. Con este resultado, el Zaragoza sigue descolgándose de la cabeza.