¿Le ha invitado el Real Madrid para el partido del día 18 de diciembre contra una selección mundial?

—Pues sí que me han invitado. Ahora mismo no sé lo que haré, aunque yo no tengo ningún tipo de prejuicios. Al revés. Una cosa es que yo me meta en alguna ocasión con el Real Madrid y otra muy diferente el respeto a una entidad como la madridista.

Entonces, ¿no hará lo mismo que Gaspart?

—No haré como el Barcelona. No me gusta. El Real Madrid celebra su Centenario, me han invitado y no hay problemas. Las instituciones están por encima de todo.

Hablando del Real Madrid, ¿le gustaría que le tocara ahora en la próxima eliminatoria de Copa del Rey?

—Pues no lo sé. Jugamos contra el equipo madridista el día 2 de enero un partido amistoso, y luego el 19 de enero en Liga. Creo que enfrentarnos al Real en Copa sería ya demasiado. Mucho Madrid, mucho blanco.

¿Quizá sería mejor ganar la Copa del Rey en el año del Centenario del Atlético con el Real como rival?

—Eso ya es otra cosa. Resultaría increíble ganarles en la final y el año de nuestro Centenario.

¿Qué opina de este Real Madrid que goleó en Oviedo?

—El Real Madrid es el equipo celestial, es el equipo de todo el mundo. Mejor dicho, ya no tiene existencia en este mundo. Pertenece a otra galaxia lejana, en la que ha aparecido un hombre listo que sabe manejar estómagos y carteras. El Madrid ya no es de este mundo. Hay que ver si es importante que el otro día me dijo un amigo mío jesuíta que en muchos países es más importante ver al Real Madrid que al espíritu santo. ¿Cómo va a pasar que una cosa celestial va a caer en la bajeza de pelear, por ejemplo, contra el Oviedo? Allí tienen que ir los terrestres. En ese partido de Copa jugó el equipo terrestre y goleó. Hay que preguntarse qué es lo galáctico si que Cúper deje escapar a Ronaldo o que el Real Madrid lo fiche.

¿Qué opina del cariz que está tomando el mundo del fútbol?

—Yo no digo que el Gobierno nos subvencione al ciento por ciento, pero sí una ayuda. El fútbol está desorganizado. Por ejemplo, el año pasado sólo recibimos en taquilla el diez por ciento del presupuesto. Yo ya no pregunto cuánto sacamos por taquillas, pues no paga ni las botas de un jugador. El fútbol es un entretenedor de masas. Es el deporte rey, pero se le trata peor que a una prostituta. Además de puta tienes que poner la cama. Así es el fútbol, guste o no a la gente. Aunque lo cierto es que el que está aquí es porque quiere.