Los temidos vampiros se presentaron ayer en las instalaciones deportivas de Majadahonda. Miembros de la Federación Española de Fútbol sometieron a controles antidopaje a cuatro futbolistas de la primera plantilla rojiblanca. Esteban, Nagore, Sergi y Stankovic fueron los jugadores que debieron pasar el control. Alguno de ellos, como el caso del portero Esteban, tuvo bastantes problemas para cumplimentar el análisis de orina. Los jugadores acababan de terminar la sesión preparatoria y siempre es complicado orinar, puesto que los jugadores ya han perdido mucho líquido durante los entrenamientos.

La Federación Española suele hacer estos exámenes por sorpresa y en esta ocasión le tocó al Atlético. El doctor José María Villalón, jefe de los servicios médicos del club, facilitó en todo momento el trabajo a los responsables federativos. El tema del dopaje es una de las grandes preocupaciones no sólo de la Federación Española sino de la FIFA y de todo el mundo del fútbol.

Por otro lado, Germán Burgos fue sometido ayer a unas pruebas por parte de los servicios médicos del Atlético. Al jugador se le hizo una analítica completa, una exploración traumatológica, una resonancia nuclear magnética de las dos piernas y una ecografía de reposo y de esfuerzo.

Burgos, a recuperarse

El cancerbero no se entrenó ayer, pues estuvo haciéndose estas pruebas. El futbolista se lesionó en el encuentro de Liga frente al Athletic de Bilbao y sufrió una contractura muscular en la pierna izquierda. El cancerbero no ha terminado de recuperarse de estos problemas musculares y por este motivo no jugó frente al Espanyol y tampoco la pasada jornada ante el Betis. No es la primera vez a lo largo de la temporada que el portero sufre estos percances y que, aunque sin importancia, le impiden jugar, por lo que ayer se sometió a las pruebas para descartar males mayores. Esteban parece que volverá a jugar este sábado.