El interés del Zaragoza por Álvaro no es nuevo. Viene de lejos. En concreto, de hace un año y medio, cuando nadie en el club aragonés imaginaba un descenso a Segunda. Ahora se ha reactivado ante la necesidad de reforzar la defensa para la próxima temporada. Por su parte, el jugador ha decidido abandonar este verano Las Palmas y se muestra más que receptivo: "Estoy entusiasmado con la noticia, porque sería un gran salto en mi carrera deportiva. El Zaragoza es un grande del fútbol español que, simplemente, cometió un desliz, pero que en tres meses estará otra vez en Primera. Yo no puedo seguir más tiempo en Canarias, porque me deben mucho dinero. Mi representante ya me está buscando una salida para julio". El brasileño agrada en el seno de la entidad maña y esta misma Semana Santa habrá una reunión con Salvador Maestro, su representante, para concretar del todo la operación.