Alfonso está casi al nivel del grupo

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Alfonso está casi al nivel del grupo

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Calero: "Hasta que no realice una sesión completa no se le dará el alta"

Vuelve Alfonso. Ya no es una especulación. Es pura realidad. El de Getafe trabajó ayer con el resto de la plantilla (suplentes y no convocados del partido ante el Valencia) y llegó a meterse en el partidillo. Hay buenas sensaciones. Es difícil (casi imposible) que pueda jugar en Balaídos el próximo domingo. No hay que olvidar que lleva casi cuatro meses parado. Pero parece difícil que el Atlético se libre de sufrirlo.

Siendo rigurosos, puede decirse que Alfonso no ha cumplido los plazos previstos (siempre se habló de que jugaría los últimos 10 partidos de Liga), pero no hay que olvidar que es una lesión delicada. La rehabilitación ha sido lenta pero parece perfecta. Ahora todos esperan que Calero le dé el alta médica cuanto antes, aunque el doctor pone matices: "El sábado ya hizo un entrenamiento muy interesante y hoy también ha estado muy bien pero no podrá recibir el alta hasta que no realice una sesión completa". Ayer le faltó muy poco. Participó en el partidillo y luego estuvo unos 25 minutos realizando ejercicios de carrera continua con cambios de ritmo por su cuenta. La abuela del Betis no paraba de animarle. El madrileño se está exprimiendo de lo lindo. No quiere ganarse la renovación con palabras, sino con juego.

Rivas sí. El nazareno sorprende a diario. Ayer salió del entrenamiento de lo más sonriente: "La recuperación va muy bien. Hoy he empezado a correr y, poco a poco, intentaré ir entrando en la dinámica del grupo". De momento, ya hay uno menos con muletas. Por cierto, hubo otra novedad en el entrenamiento verdiblanco. Marcos, portero del juvenil, se entrenó con la primera plantilla.

Lo esperaban con los brazos abiertos

La sonrisa de Tais y Cañas mientras contemplan a Alfonso dándole pataditas al balón no es gratuita. El madrileño es un jugador querido en el vestuario y en la plantilla todos son muy conscientes de lo mal que lo ha pasado. Además, ayer todo era buen humor en el vestuario del Betis. Por fin un lunes sin caras largas por los malos resultados. En la imagen inferior, Alfonso se pone el peto antes de empezar el partidillo, en el que ya dejó destellos de calidad.