Galáctico Samuel

Copa del Rey | Recreativo 0 - Mallorca 3

Galáctico Samuel

Galáctico Samuel

macario muñoz, justo gonzález , juan navarro y agencias

Decidió un genial Etoo. Guerrero anuló un gol a Xisco, muy discutible. El Mallorca jugará la UEFA

Tenía varias cuentas pendientes. La más antigua, con la afición del Mallorca, la suya. Desde Navidad. Desde aquel partido con el Barça en Son Moix en que se autoexpulsó y propició con ello una derrota brutal por 0-4. Con sólo la paella no valía. Debía un partidazo, un par de goles, un título. Él: Samuel Etoo. El Galáctico de Camerún y de Palma. No se han acabado los galácticos, Florentino, no.

Luego estaba lo de Foe, claro. Cuando venció por bajo a Luque en el 2-0, salió corriendo, se quitó la camiseta, miró al cielo y gritó: "¡Pour toi!". Para tí. Hubo otro segundo brindis, en el 3-0, memorable, y habrá otro bis esta tarde en París, cuando lidere a la selección de su país contra la de Francia, en la final de la Copa Confederaciones. Porque cuando este ejemplar de AS llegue a sus manos, Etoo estará en París, abrazado a los suyos, dispuesto a que Europa y el mundo le den la razón cuando dice: "Soy más feo que Beckham, pero mejor futbolista". Sencillamente, extraordinario.

El Mallorca ganó porque tenía al as de corazones y tiene mejor equipo. Le costó hincarle el diente al Recre, que cayó con las botas puestas y salió mal. Demasiado aislado arriba Raúl Molina. Demasiado puesto a contener. Sólo pareció con capacidad para ganar el partido cuando Alcaraz puso a Xisco, que es de Manacor, y ya se sabe que no hay peor cuña que la de la misma madera: nada más entrar, Molina se fue de Nadal y le puso un balón perfecto. Xisco se levantó sobre Poli y cabeceó el gol del empate. Desde su posición en la banda, Ojo de Águila Rafa Guerrero vio falta en el salto del recreativista. Como es habitual, se la cogió el No me jodas con papel de fumar. Dijo Pérez Sánchez en la SER: "En Inglaterra, ese gol no se anula". En Inglaterra no hay liniers como Guerrero, tan así. El Recre tiene todo el derecho del mundo para lamentar ese 1-1 que nunca existió. Quizá ahí hubiera cambiado todo. O no. Etoo habría seguido jugando con los de enfrente, conste.

Y los de enfrente son cosa seria. Como Manzano, un señor entrenador. Máximo respeto a Queiroz y a Rijkaard. ¿Pero que deberán hacer nuestros Manzano para entrenar un día al Madrid o al Barça? El Mallorca de ayer fue el equipo serio y ganador de siempre. Le costó entrar porque se equivocó. Lo suyo es tener la pelota, dársela a Ibagaza y que él la reparta: ahora a Riera, ahora a Lozano, tómala Samuel o ¿a ver, dónde está el Rifle? Un gol de Pandiani y dos de Etoo confirman que el Mallorca tiene pólvora y en las finales, ya se sabe: quien tiene pólvora se bautiza.

Por fin, Ibagaza. Le costó al Mallorca ver claro. Rifaba la pelota, le daba para arriba, cosa que al Recre le iba de perlas. Pero, en estas, un robo cualquiera llevó la bola al Caño y la final empezó a desequilibrarse. La apertura de Ibagaza a Pandiani, caído a la izquierda, acabó con un centro de éste hacia Etoo que Loren interceptó a empujones y con la mano. Penalti. 1-0. El cuadro soñado para el Mallorca que supo desde siempre que correría peligro si su rival se adelantaba.

El gol anulado a Xisco marcó el tránsito entre una y otra parte, en los vestuarios y en la grada del Martínez Valero que vivió una fiesta maravillosa a cargo de dos aficiones ídem. Pero tras el descanso, la lógica se fue imponiendo. El Mallorca tiene más fútbol y tuvo más paciencia. Para esperar a que apareciera Etoo y le ganara por fin la Copa del Rey. Que le lleva a la UEFA, por cierto. En una final modesta, pero que habrían firmado Madrid y Barça, Depor y Real, Celta y Valencia o Betis. Las finales entre los considerados grandes acostumbran a ser como la de ayer, discretillas de fútbol y decididas por el astro de turno. La de hace un año, en el Bernabéu, la ganó Valerón. La de la Champions, Zidane y las manos de Casillas. La de ayer, Etoo. Al Recre, nuestro reconocimiento. Quiso y no pudo. Hasta pronto en Primera.