¡Lo nunca visto!

¡Lo nunca visto!

Quién decía que la Vuelta era aburrida? Después de lo de ayer, creo que queda muy poquito por ver en carrera. ¡Qué guapo estuvo el temita del coche con televisión! Al final, el espectador se va a enganchar a la Vuelta sólo para ver las movidas que hay, que, aunque parezca mentira, hay muchas. Lo que pasa es que casi nunca dicen nada de ellas. Por mucho que la gente critique la actitud de Manolo, a mí me da igual, cada uno puede hacer lo que quiera. Al fin y al cabo la multa la paga él. Por su acción, de nuevo se vuelve a hablar de ciclismo. Yo no voy a entrar en si estuvo acertado o no. Yo paso. Tengo suficiente con lo mío. Pero, por lo menos mientras duró, algunos dejamos de respirar fuerte y de sufrir y pasamos un momento divertido. Aunque, claro, no tanto como el que pasaron en alguna emisora de radio, que por lo que dicen, todavía se están riendo.

Bueno, mientras escribía esto lo he visto repetido por televisión. ¡Qué pasada! Todo el comedor aplaudiendo. En carrera no parecía tanto, pero ahora era como ver a un futbolista al que le han pitado un penalti injusto fuera de tiempo y se cree que tiene el derecho de insultar al árbitro. Pero, señores, esto es ciclismo y esas palabras suenan muy mal para decírselas a la gente que, al fin y al cabo, nos da de comer.