Rijkaard no reserva nada para la Copa

Copa del Rey | Gramenet - Barcelona

Rijkaard no reserva nada para la Copa

Rijkaard no reserva nada para la Copa

rodolfo molina

Hasta Ronaldinho está en la lista. Novelda y Figueres no se olvidan

El Barcelona aún sangra por la herida abierta el domingo, con su primera derrota liguera, ante el Valencia, cuando ante sí se presenta un partido-trampa: la Copa del Rey lo ha emparejado con la Gramenet, un equipo de Segunda B que recupera para el culé todos los fantasmas de ediciones recientes.

El recuerdo de las eliminaciones contra otros modestos de la categoría a las primeras de cambio, como el Novelda (2001) o el Figueres (2002), pesa en la memoria del Barça, que no puede permitirse la frivolidad de quedar K.O. en los treintaidosavos de final. Frank Rijkaard se lo toma en serio: para adaptarse a la hierba artificial del estadio Municipal programó ayer un entrenamiento, tras el que ha convocado a sus mejores hombres disponibles, incluido Ronaldinho, que arrastra una sobrecarga en una rodilla y posiblemente sea reservado.

Las comparaciones son odiosas, y por eso a veces no cabe más remedio que establecerlas. Para que queden claras las enormes diferencias enter el Barça y la Grama valen unos cuantos datos: 106.000 socios culés por 1.500 colomenses, 162 millones de euros de presupuesto blaugrana contra un millón, un estadio para 98.000 espectadores contra un campo municipal que da cabida a 5.000 y un salario más alto que va de los 7,4 millones de euros brutos anuales de Patrick Kluivert a los 60.000 euros de Xavi, la figura del equipo que dirige Julià García. La Grama espera recaudar unos 150.000 euros entre venta de localidades y derechos de televisión, lo que justifica que cuando se celebró el sorteo, el presidente, Francisco Ortega (un granadino de 56 años), dijera que les había "tocado el Gordo de Navidad".

La Gramenet, eterno aspirante a subir a Segunda A, se jugará la vida contra el Barça. Y quizás no le haga falta tanto para ganar.

El desagravio del césped artificial

Tres equipos de Primera División desairaron a la Gramenet en ocasiones anteriores durante la celebración de la Copa del Rey. Valencia, Osasuna y Deportivo se negaron a jugar sobre el césped artificial del estadio Municipal, lo que obligó al equipo colomense al destierro en dos ocasiones. Contra el Valencia jugó en el Narcís Sala, de Sant Andreu, y ante Osasuna y Mallorca utilizó el campo de la Ciudad Deportiva del Espanyol, en Sant Adrià. Lo más duro llegó con el Depor, que se negó a disputar la eliminatoria sobre sintético. Como la Grama mantuvo su postura, la Federación Española de Fútbol descalificó al equipo. El Barça ha aceptado jugar en Santa Coloma sin problemas.