El partido de Copa disputado ayer en Santiago entre el Compostela y el Deportivo acabó con un muerto. Manuel Ríos Suárez, seguidor del Deportivo de 31 años, falleció a consecuencia de un golpe en el hígado, al parecer, después de una pelea callejera con hinchas del equipo santiagués. Aunque no se descartan otras posibilidades porque, al cierre de esta edición, la Policía aún no había dado detalles sobre el violento episodio. Manuel Ríos ingresó ya cadáver en el Hospital Clínico de Santiago hacia las 12:40 horas de la noche, según indicaron fuentes médicas. A la espera de realizar la autopsia, todo apunta a un reventamiento hepático que le causó la muerte. En el mismo centro hospitalario también fueron atendidos otros dos varones de 23 años con diversas contusiones.
Unos 500 miembros del grupo radical Riazor Blues se desplazaron hasta Santiago y la Policía tuvo que realizar cargas después del encuentro disputado en San Lázaro para evitar peleas con grupos radicales del Compostela, como la Peña Chango's. Los Riazor Blues estaban destrozando el estadio. En el campo sólo había 4.000 espectadores. Si se demuestra que el fallecimiento fue dentro del campo, la responsabilidad sería del club e intervendría Antivilencia; si fuese fuera, la Delegación de Gobierno.
