¿Retrasado o cancelado?

¿Retrasado o cancelado?

La victoria del domingo frente al Málaga ha ahorrado, de momento, el precio de un billete de avión con destino Sevilla. Por mucho que Víctor quisiese mirar para otro lado, los 3 puntos del domingo han supuesto que ahora mismo, en algún lugar del mundo, haya un pasajero con destino al aeropuerto de San Pablo cuyo billete está retrasado, o quién sabe, cancelado, una duda de la que sólo el paso del tiempo podrá sacarnos.

Se queja Lopera, y no sin razón, que quién, entrenador o jugador, le garantiza salir del bache; quién, en el hipotético caso de que Víctor tuviese que salir del Betis, tiene la llave que cierre la caja de los truenos en verdiblanco para mandarle un pasaje de inmediato. Lopera, dueño de la cartera, pide, reza, clama porque cree en su técnico, "honrado, serio y trabajador como pocos" y a veces ha salido ganador en sus empecinamientos, aunque en éste lo sigue teniendo difícil...

Víctor y Lopera se equivocan al ver en la prensa el fantasma contra quien luchar. Entiendo que el presidente quiera agotar todas las vías posibles antes de tener que aflojar más dinero, pero así son las reglas del juego cuando las cosas no funcionan con lo que se tiene disponible. De momento, que reine la calma en la calle Jabugo. ¿Hasta cuándo? Sólo el bolsillo de Ruiz de Lopera tiene la respuesta.