"Lo de Gurpegui es de vergüenza, un cachondeo"

Atletismo | Dopaje

"Lo de Gurpegui es de vergüenza, un cachondeo"

"Lo de Gurpegui es de  vergüenza, un cachondeo"

Pablo Vázquez

Tras superar la decepción de Atenas, el mediofondista sevillano Antonio Reina (Osuna, 23 años) irrumpe con fuerza. Se denusda en AS y no deja títere con cabeza: Alberto García es un tramposo, los futbolistas no dan ni golpe, no pasan controles serios y denuncia que la Federación Española de Atletismo "tapa lesiones muy raras".

Pero que credibilidad vamos a tener los deportistas españoles en el extranjero si el tal Gupergui da positivo hace más de dos años por consumir nandrolona y sigue jugando cada domingo? Es de cachondeo. Alberto García, como debe ser, por tramposo, está dos años suspendido, y Gurpegui, cómo es futbolista del Athletic de Bilbao, riéndose de todos nosotros. Es de vergüenza; con mayúsculas". Antonio Reina (Osuna, Sevilla, 1981) va de frente, no se corta. Y lo que dice nunca pasa inadvertido. Sabe que sus declaraciones levantarán ampollas pero lo dice convencido: "No hay derecho que a los ciclistas y atletas nos traten como a delincuentes y que a los futbolistas, encima de que no pasan un control antidopaje en condiciones, se les permita todo. ¡Cómo no voy a estar indignado!" apunta Reina (recordman nacional de 800, 400 y 4x400m), uno de los mejores mediofondistas del continente.

El atleta de Osuna, bronce en el europeo de Viena 2003 y que no pudo clasificarse para la final de los juegos de Atenas, va más lejos en su denuncia: "¿Doping en el fútbol?, si los controles fueran serios, más de uno se llevaría una sorpresa. No me creo que determinados jugadores del Real Madrid o de otros equipos grandes estén al cien por cien todo el año. Y jugando tres competiciones. ¡Que me lo expliquen!". Reina, que afirma que Gurpegui ya habría cumplido la sanción de dos años si jugara en otro equipo más modesto de Primera División, tiene claro como erradicar el dopaje del mundo del deporte: "Estoy de acuerdo con lo que dijo en AS el marchador José Antonio González. Hasta que no sancionen a los tramposos de por vida, no hay nada que hacer. El que la hace, la tiene que pagar. No hay otra forma de arreglarlo".

El atleta sevillano se consideraba amigo del madrileño Alberto García pero al dar positivo por EPO (Lausana marzo del 2003) , le decepcionó: "Volverá a la competición y habrá que ayudarle pero nunca más confiaré en él. Es un tramposo, nos engañó a todos y a los atletas españoles nos ha quitado prestigio y mucho dinero".

Dice Reina que por culpa del del fondista vallecano y del positivo del esquiador nacionalizado Johan Muehlegg los atletas españoles en agosto del 2003 sufrieron una cruel persecución en el mundial de París: "Fueron a por nosotros; a saco. Y es normal. Gurpegui no cumple la sanción, el positivo del campeón de Europa el ciclista Manzano denuncia y no pasa nada... ¿Cómo no vamos a estar permanentemente bajo sospecha si en nuestro país nunca pasa nada?".

Reina, que en el 2005 aspira a subir al podio en el Europeo de Madrid (4 y 5 de marzo) y en el Mundial de verano de Helsinki en la prueba de 800m, también denuncia la hipocresía de muchos atletas españoles: "Son muy falsos y no se atreven a decirle a la cara a Alberto García lo que piensan, que es un tramposo. Y luego dice en AS que no le hablamos, ¿Qué quiere Alberto García, que nos pongamos de rodillas?, ¿cómo carajo lo vamos a respetar si él no nos ha respetado a nosotros? ¿Y encima va de mártir?. Si yo no he tomado nada y me acusan de dar positivo por EPO, me hipoteco y me arruino hasta demostrar mi inocencia".

Todo se tapa.

Antonio Reina sigue hablando claro. Y va directo a la yugular. Repite que en el atletismo hay más doping de lo que la gente se cree. Y culpa a la Federación Española de Atletismo de muchas cosas que pasan: "Es muy extraño que algunos atletas no vayan a las grandes competiciones y luego, de forma sorprendente, estén cuatro o seis meses lesionados. Sé que la Federación si detecta algo, te llama para decirte que tienes que estar tres meses lesionado. A la Federación, que no va tirar piedras sobre su tejado, no le interesa que salgan a la luz muchos positivos. No debería tapar tanto. Y debería echar a todos los tramposos" afirma Reina, sabedor de la repercusión que tendrán sus aseveraciones: "Soy así, voy de frente, siempre digo lo que pienso y me encaro con quién haga falta".

También repite que si las sanciones fueran de por vida, mánagers, entrenadores: "Y sobre todo los médicos, que se están forrando a costa de los deportistas, se acojonarían y se irían al paro". Reina dice que nunca se ha dopado; nunca se lo han propuesto. Los habría echado a patadas. Sólo toma los complejos vitamínicos que, según las análiticas que regularmente pasa, le receta su médico, el mismo de la Federación Española. Suele pasar unos 20 controles al año, en condiciones. Eso sí, conoce a la perfección como se lo montan determinados médicos: "Así está el mercado. Hay dos tarifas. El médico barato cobra 24.000 euros (4 millones de pesetas) pero te pueden pillar. El caro, el bueno, se lleva el doble, 48.000 euros, y te asegura que nunca te pillarán. Estos médicos no tienen vergüenza y están ensuciando el deporte español y mundial".

Antonio Reina, que ha firmado por cuatro años con la firma Nike, para cómo está el mercado, un millonario contrato, pide que todos los atletas que hablen claro: "La gente se acobarda y no cuenta todo lo que sabe. No se deberían tapar tantas cosas". El sevillano no rehuye ninguna pregunta. Y entra al trapo. Por eso le indigna saber que varios jugadores del Barça se encararon con la marchadora María Vasco tras decir en AS que los futbolistas, para lo que cobran, no trabajan nada: "Me gustaría echarmelos a la cara. Que se metan conmigo, no con ella. Los futbolistas se lo montan de miedo y no dan ni golpe. Miras uno de sus entrenamientos y siempre los ves cogidos de la mano, haciendo ronditos y riéndose. Reto a cualquier futbolista a un entrenamiento; donde quieran. Tanto en fuerza, velocidad, fondo, potencia, resistencia... les gano. Y al final se verá como estamos de pulsaciones y quién está más trabajado".

Reina, de 23 años, (1,85m y 72 kilos) también recalca que si los futbolistas se entrenaran más, no saldrían tanto por la noche: "Ni se montarían tantas juergas. ¿Pregúntale a cualquier deportista de élite cuántas veces le apetece salir a tomar una copa?". Eso sí, recomienda hacer el amor antes de una gran competición: "Te relaja un montón y duermes como un enano".