El delantero rumano del Getafe Gica Craioveanu y el presidente del club madrileño, Angel Torres, anunciaron este miércoles la renovación, por un año más, del ariete, tras la reunión que tuvo lugar entre el máximo mandatario y el futbolista.

Craioveanu, que cumplió 37 años el pasado mes de febrero, llegó al conjunto azulón en el verano de 2002, cuando militaba en Segunda División, y protagonizó, un año después, en la temporada 2003-2004, el ascenso a la máxima categoría del fútbol español, convirtiéndose así en el ídolo de la afición del Coliseum Alfonso Pérez.

Tras los rumores que colocaban al rumano en el fútbol qatarí, finalmente el apoyo mostrado por la hinchada azulona durante esta temporada y el éxito de su equipo en la presente campaña, la de la permanencia en Primera División, el delantero decidió quedarse en Madrid.

Gica, treinta y cinco veces internacional con su selección, antes de recalar en 2002 en el Getafe jugó en España tres temporadas en la Real Sociedad y cuatro en el Villarreal, fue jugador, anteriormente, entre otros, del Universidad de Craiova.