El italiano Ivan Basso, suspendido cautelarmente desde el pasado Tour de Francia por su presunta implicación en la Operación Puerto, declaró ayer sobre su vinculación con Eufemiano Fuentes ante la Comisión Antidopaje del Comité Olímpico Italiano (CONI). El ciclista llegó acompañado de su abogado, Massimo Martelli, y respondió a las preguntas del procurador del CONI, Franco Cosenza. Esta comparecencia supone el primer paso dentro de la fase de instrucción del caso, aunque Cosenza ha creído necesario fijar una nueva audiencia el 12 de septiembre.

Tras el careo, Basso aseguró que estaba "contento por el rumbo que han tomado las cosas". "Estoy sereno y quiero que se sepa que todo ha ido como debía. Volveré a correr y no veo por qué no debería hacerlo con el CSC", concluyó. Pero de momento, y hasta que no haya una resolución firme, su equipo no le dejará competir. Esta decisión fue duramente criticada por el letrado del corredor, Massimo Martelli, aunque afirmó que no hay "ni un sólo documento que pruebe la implicación de Ivan en esta trama. Todo son pruebas indiciarias".

Mientras tanto, Franco Cosenza señaló que "Basso ha respondido exhaustivamente a todos los hechos, pero me reservo valorar más elementos porque le he citado de nuevo".

Más información.

Por otra parte, la Unión Ciclista Internacional (UCI) anunció ayer en un comunicado que el gobierno español le va a transmitir nuevos informes de la Operación Puerto. La nota confirmó que "estas informaciones complementarias de la Guardia Civil serán adjuntadas a los expedientes que la UCI elabora sobre los corredores implicados y que serán enviados a las federaciones nacionales correspondientes, a fin de permitirles tomar las decisiones adecuadas".

También ayer el ministro del Interior alemán, Wolfgang Schuble, rechazó la posibilidad de crear en su país una ley antidopaje.