Supongo que, todavía, no dará crédito a las experiencias que ha vivido en los últimos días.

La verdad es que nunca me había visto en una parecida. Por un lado tengo un buen sabor de boca por la cumbre obtenida y, por otro, estoy afectado por la tragedia y por los once muertos. También he de decir que sigo cansado por el viaje de vuelta y tengo el sueño cambiado.

Once muertos es la cifra oficial que manejamos a estas alturas pero no está todavía muy claro nada.

La verdad es que resultaba muy complicado cuantificar la dimensión del desastre porque había fallecidos, desaparecidos que luego consiguieron regresar, evacuados y otros casos diferentes. Cuando yo me marché de la montaña se hablaba de esa cifra: nueve muertos seguro y dos desaparecidos.

Conocía a la mayoría de los afectados, ¿verdad?

Sí, sí. A unos más que a otros. Es normal. Siempre que estás en un campamento base haces amistad especial con determinada gente. Por ejemplo, me acuerdo mucho de Hugo, un francés de 62 años con el que solía tomar té por las noches. También algún compañero alemán Ha sido tremendo.

¿Qué es lo que ocurrió?

Un poco de todo. Por un lado, se atacaba la cumbre a una hora tardía. Pero luego la clave fue el accidente. Cayó un bloque que provocó una avalancha y que partió las cuerdas fijas. Algunos murieron por el impacto, otros arrastrados y los demás despeñados al intentar destrepar la montaña. Fue muy duro.

Pero usted apenas se enteró de lo acontecido hasta que llegó al campo base.

Exacto. Hice una ascensión bastante limpia y pernocté de regreso en el campo 3. Hacía un día precioso y me sentía muy feliz por haber subido el mítico K2. Al llegar, no podía dar crédito a lo que se oía por allí. La gente estaba desesperada porque se temía lo peor. Tenían muchos amigos que nadie sabía si conseguirían bajar.

¿De quién se acuerda ahora Alberto Zerain?

De los muertos, de sus familias y de sus amigos. Al final no he saboreado la cumbre como se merecía porque esta tragedia te deja hecho polvo. Es algo que todavía está muy fresco.

¿Qué planes tiene ahora?

Lo primero es comparecer ante los medios. No me apetece demasiado pero a la expedición le ha parecido lo más oportuno. Tomaré vacaciones y me pondré a trabajar. Soy camionero, no vivo de la montaña.