"Los malagueños somos buenos haciendo equipo"

Cómo vivió ese hoyo 17 que fue clave para la victoria de Europa en la Solheim Cup?

Estaba bastante nerviosa sabiendo que todo el equipo de Europa estaba pendiente de mi punto. Las once jugadoras, las capitanas... Y la verdad es que di un golpe increíble. No lo olvidaré nunca.

Ha debutado en una Solheim con sólo 24 años, ¿le sorprendió estar en el equipo?

Suzann Petersen me dijo que estaba dentro antes de que me avisase Alison Nicholas, la capitana. Nunca te lo terminas de creer. Pero no me sorprendió.

Si le sorprendería que debutando le pusiesen en un partido tan decisivo...

Eso sí. Yo pensaba jugar el partido número 4 o 5. No esperaba que me pusiesen la 11. Me hizo sentir orgullosa. Me dije: 'tranquila, tu puedes y hazlo por tus compañeras'. He estado en situaciones de presión así en otras ocasiones y eso me ayudó. Tuvimos una gran celebración ¿No escucha mi voz?

¿Satisfecha por el recibimiento que ha tenido en España?

Sí. El golf femenino no suele salir en los medios. Y la verdad es que estoy muy contenta. Me habéis recibido muy bien.

No es la única malagueña con título continental con Europa. Jiménez consiguió la Ryder en 2010, ¿qué hay allí para ser tan buenos en equipo?

Para el juego colectivo vamos muy bien. Somos muy abiertos. Damos mucho apoyo por nuestra forma de ser. Una jugadora me dijo que el equipo no hubiese sido lo mismo sin mí. Y yo creo que Miguel es de la misma manera. Es un tío encantador y todo el mundo lo sabe.

¿Cómo empezó?

Lo hice en un campo público. En el club de San Pedro, que era un tee de prácticas. Íbamos muchos niños durante una hora los sábados. Allí empecé a destacar y me hice socia de Guadalmina, que es mi club de ahora.

¿Por qué se decantó por ir a Estados Unidos?

Entré en la Selección con trece años y veía a las mayores que se iban allí a estudiar. Nunca pensé en otra cosa que no fuera ir a jugar a Estados Unidos.

Empezó en la Universidad...

Sí. Estuve en Arizona State cuatro años y entendí los hábitos de vida de allí. Después en 2009 jugué la Escuela Americana, gané el Madrid Masters, y a final de año conseguí la tarjeta del LPGA (Circuito Profesional).

Y logró ser la rookie de 2010. No está mal. ¿cómo es la vida allí?

Sí, acabé muy contenta con mi debut. Allí no tengo residencia fija. Sigo residiendo en España y cuando no hay torneo siempre que puedo vuelvo para ver a mi familia, a mis amigos y tomar cervecitas por las tardes, que allí no se hace. El objetivo para la próxima temporada es un título. Hice algunos cambios de swing y a ver si es posible.

¿Cómo se define como jugadora?

Soy bastante precisa. No fallo mucho. Voy muy rectito. No me meto en problemas y tengo buen juego corto. Como Jiménez, que no le pega muy largo, pero no se mete en problemas.

¿Sus referentes?

En mujeres, lo era Sorenstäm y después Ochoa. Ya están retiradas. En hombres, me gusta el juego de los españoles: Olazábal, Sergio, Miguel... y Donald.

En la Solheim hubo un recuerdo para Seve...

Sí. Teníamos un vídeo para motivarnos que le mandó a las chicas en Chicago en 2009. Había una foto suya en el vestuario y le dedicamos la victoria.

¿Qué necesita el golf femenino para seguir creciendo?

Acontecimientos así nos vienen bien. Me ha dicho mucha gente que esta Solheim no tenía nada que envidiar a la Ryder.