Tiger Woods, sancionado con dos golpes por un mal dropaje

El Comité sancionador del Masters de Augusta penalizó a Tiger Woods con dos golpes por realizar un dropaje ilegal en el hoyo 15 de la segunda vuelta. En su tercer impacto, la bola del Tigre dio en la bandera, con la mala fortuna de que salió repelida hacia el agua. Para el quinto golpe tomó la decisión que hizo pública en rueda de prensa: "Fui a la zona dropaje, pero estaba húmeda y tenía barro, así que decidí volver atrás, al sitio desde el que había jugado antes, pero me fui dos yardas más atrás para asegurarme que el golpe sería un poco más corto y que no golpearía otra vez a la bandera". Esa opción está prohibida, porque, según la regla 26, el juego se debe reanudar en la zona de dropaje, por la línea de entrada al agua o en el mismo lugar donde estaba la bola, la vía que tomó Tiger, pero "dos yardas más atrás". Acción ilegal.  

El golfista se ha librado de la descalificación por una norma reciente, la 33, que permite al comité decidir la sanción. Esta mañana lo han revisado y consideran que el jugador no era consciente de que estaba rompiendo una norma. Esto explicaba Tiger en su twitter, pocas horas antes de iniciar la tercera vuelta: "No sabía que había hecho un dropaje incorrecto antes de firmar mi tarjeta. Por la mañana del sábado me reuní con el Comité y me dijeron que en principio no había sanción, pero los jueces hicieron indagaciones tras mis declaraciones en la rueda de prensa. Tras discutir la situación con ellos han decidido sancionarme con dos golpes. Entiendo y acepto la penalización y la decisión de los jueces".

Tiger comenzará la tercera vuelta a cinco golpes del líder Jason Day (en lugar de a tres). Eso sí, su compañero de partido no variará y continuará siendo Gonzalo Fernández-Castaño, que ha dicho: "Si jugar con Tiger es un circo, esto será el Cirque du Soleil".