Carolina Marín no encuentra oposición en el circuito europeo

Carolina Marín (Huelva, 15-6-1993) es el presente y el futuro del bádminton español como refleja su palmarés en este 2013: campeona de España (cinco consecutivos), quinta en el pasado Mundial de China (primera española en alcanzar los cuartos de final) y vencedora de los internacionales de Suecia, Finlandia y en los Grand Prix de Londres y Escocia. Una colección de trofeos que se completa con un Europeo Sub-17, otro Sub-19 y un bronce en los Mundiales junior de 2011.

Unos resultados que son fruto del trabajo constante al que se somete Marín en la Residencia Joaquín Blume de Madrid desde que llegara hace ya siete años: “Entrenar, entrenar y entrenar. Trabajo de lunes a sábado dos horas por la mañana y tres por la tarde, y los martes y jueves hago triple sesión”.

A Asia. Desde la Federación española aseguran que tanto Marín como Beatriz Corrales necesitan seguir creciendo y por ello ha creado un ambicioso programa para que los dos mejores valores del bádminton español pasen largas temporadas entrenado y compitiendo en los países asiáticos, cuna de este deporte: “Para seguir desarrollando su juego y mejorar deportivamente necesitan otros retos. Casi no encuentran oposición en el circuito europeo”. Una afirmación que concuerda con el relato de Carolina Marín: “La diferencia entre Europa y países como China, Tailandia, Indonesia o Corea es abismal. De las 20 primeras en el ránking mundial sólo dos somos europeas: la alemana Juliane Schenk, número 8, y yo, que soy la número 18. El resto son asiáticas. Y la única manera de mejorar es entrenar y competir con ellas allí.”

La próxima parada del plan diseñado para ellas les llevará a competir en el Superserie de Corea (equiparable a un Masters 1.000 de tenis), a partir el 7 de enero, y en el Superserie Premium de Malaisia (Grand Slam) del 14 al 19 de enero. Allí se medirán y entrenarán con las mejores jugadoras del mundo.

Todo para que la progresión de esta joven onubense no se vea frenada: “Creo que con el trabajo que realizo con mi entrenador, Fernando Rivas, y con el apoyo de mi familia puedo seguir mejorando. Me falta ganar un Europeo absoluto, una medalla en unos Mundiales y una medalla en los Juegos de Río. Y creo que son unos objetivos muy factibles”.