Peterson se aleja de Dallas ¿Es posible el milagro McFadden?

Durante toda la noche del draft los aficionados estuvimos mirando a los Cowboys con el rabillo del ojo. Ninguno nos acabábamos de creer las declaraciones de su staff directivo en las semanas previas, anunciando que jamás negociarían con su primera ronda para conseguir a un jugador veterano. Esperábamos que fuera una cortina de humo y que consiguieran cuadrar el círculo para conseguir al mejor corredor de la NFL o que, en su defecto, se dejarían el alma para subir a por Gurley.

El sueño de Gurley se convirtió en pesadilla cuando fue elegido con el pick 10 por los Rams, antes de lo esperado. Y el de Peterson acabó en el momento en que eligieron a Byron Jones, un cornerback, con su pick 27.

Así que ya solo queda ver si en los dos próximos días encuentran a un corredor que pueda sustituir a DeMarco Murray. Parece que no será sencillo y el convencimiento de Romo de que ganarán la Super Bowl se antoja un anuncio un poco precipitado.

Pero quizá haya llegado el momento de poner en valor el fichaje del equipo en la última agencia libre. Darren McFadden. Un corredor que para casi todo el mundo está acabado y ha perdido el potencial con los años. Un potencial, a propósito, nunca desarrollado hasta el límite de sus posibilidades. Porque no hay que olvidar que McFadden, por talento, podría ser una superestrella en esta liga.

La pregunta es si el jugador tiene gasolina suficiente, puede ser capaz de jugar una temporada completa sin lesionarse y conseguir, por fin, que esos destellos que tantas veces nos han dejado boquiabiertos puedan convertirse en algo habitual en cada partido.

Muchos aficionados y analistas han dicho en los últimos años que McFadden tiene talento de sobra para haber aspirado al hall of fame. Quizá en un ataque tan potente como el de Dallas, con la mejor línea ofensiva de la liga abriendo huecos, recuperado de sus lesiones y con menos kilómetros en las piernas de lo que dice su edad (27 años), McFadden se convierta, por fin, en una de las estrellas más brillantes en el reino de la estrella solitaria.