NFC ESTE desde dentro
El enigma Darren McFadden se traslada a los Dallas Cowboys
El sistema de bloqueo impuesto por Bill Callahan en los Cowboys ha sido un éxito rotundo, pero a día de hoy McFadden no encaja demasiado bien en él por sus características.
No es la primera ni tampoco será la última vez que hable de la relación de Jerry Jones (propietario de los Cowboys) con el estado de Arkansas y su principal equipo universitario, los Razorbacks. Jones nació en Los Angeles pero pronto se mudaría a North Little Rock, Arkansas, donde terminaría siendo una estrella en el instituto, y posteriormente campeón nacional a nivel universitario con los Arkansas Razorbacks. En los cuales curiosamente tuvo como compañero a Jimmy Johnson, hombre al que confiaría el mando de los Dallas Cowboys en sus inicios como propietario.
Viendo estos precedentes no es de extrañar que Jerry Jones siempre haya tenido una devoción por todo lo que sale de la Universidad de Arkansas. En el Draft de 2008 no pudo conseguir al premio gordo, Darren McFadden, y tuvo que conformarse con Felix Jones, otro Razorback. Durante tres temporadas (05-07) la terna de corredores que juntaron los jabalíes fue demencial: Darren McFadden, Felix Jones y Peyton Hillis. Todos de mejor o peor forma han tenido un paso reseñable por la NFL. Durante esa época universitaria DMC fue el eje de una formación Wildcat que le terminaría situando como el jugador más condecorado en la historia de los Razorbacks, siendo propietario de todos los records terrestres de la institución. Además del segundo jugador con más yardas terrestres de su conferencia, SEC, sólo por detrás de Herschel Walker.
Uno de los últimos jugadores escogidos en primera ronda por Al Davis lo tenía todo para hacer historia en la NFL. A sus aptitudes físicas y técnicas se le unía la forma más elegante y portentosa de correr que había en la Liga, pero curiosamente sólo tiene una temporada realmente reseñable en sus siete temporadas con los Raiders.
¿Está Darren McFadden sobrevalorado?
La respuesta más sencilla sería un sí rotundo. Siete años en la Liga, varios de ellos siendo catalogado como una estrella tanto en la realidad como en el fantasy football, pese a haber podido corresponder a sus fans y propietarios con sólo una temporada sobrepasando las 1.600 yardastotales. Las lesiones han sido el factor más importante a la hora de lastrarle su progresión, pero no el único, quizá sea utópico pensar en un renacimiento del McFadden de 2010 e incluso una versión superior. Especialmente amparándonos en su técnica, siendo DMC un corredor principalmente downhill que no está acostumbrado a jugar en un esquema de bloqueo zonal donde debe esperar pacientemente a encontrar el hueco. El sistema de bloqueo impuesto por Bill Callahan en los Cowboys ha sido un éxito rotundo, pero en el que a día de hoy McFadden no encaja.
Ahora mismo es el segundo corredor en el plantel, pese a que se espera en los comienzos que tanto él como Joseph Randle (si mantiene aparte sus problemas externos) compartan muchos acarreos. Darren McFadden como suele ser costumbre, no ha tardado en señalar que se siente tan excitado como un rookie. Su veteranía y conocimiento se antojan importantes en un grupo de corredores joven, y del cual se espera acaben complementándose a la perfección. Pese a todo, no somos pocos los soñadores que esperan un Darren McFadden rejuvenecido que muestre al mundo entero todo su pedigree.