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GREEN BAY 13 - CHICAGO 17

Chicago arruina la fiesta de Favre en Lambeau Field

Con una defensiva no permitió a Aaron Rodgers y compañía entrar en ritmo, los Osos vencieron a Green Bay en la noche del retiro del No. 4 del mítico QB.

Actualizado a
Favre, durante el partido.
AFP

El duelo tomó tal forma, que Aaron Rodgers terminaría por resolverlo a la Brett Favre.

Al final, Rodgers no pudo evitar la derrota de Green Bay ante Chicago por 17-13, revés que, como juego digno de la rivalidad más añeja en la NFL, quedará tatuado en la memoria de los aficionados de Empacadores y Osos por el marco en que éste se dio.

Durante meses, quizá años, Green Bay, sus aficionados y los del resto de la Liga anticipaban el día en que los Empacadores le rindieran un merecido homenaje a Favre por el significado e impacto que su nombre tiene en la historia de la franquicia.

Favre fue honrado con el retiro de su mítico número 4 y con su nombre en el Anillo del Honor del Lambeau Field al medio tiempo de un duelo al que los Osos llegaron determinados a no servir de comparsa.

Así es como Chicago honró su rivalidad con Green Bay y lo hizo con una defensiva que le impidió a Rodgers entrar en ritmo y un ataque lo suficientemente eficiente para conseguir apenas su segundo triunfo en Lambeau Field desde 2008 y segundo en sus últimos 12 encuentros ante los Empacadores, incluidos Playoffs.

La defensiva de los Osos comenzó a imponer condiciones desde el inicio, cuando frenó en cuarta y 2 en la yarda 48 de su territorio a Eddie Lacy.

Green Bay pudo llegar a la zona final gracias a la posición de campo que ganó tras frenar a Chicago en la yarda 25 de los Osos.

En esa serie, Tracy Porter le dio un aviso a Rodgers de lo que lo haría sufrir más adelante al interceptarlo en una acción que fue anulada por un castigo de los Osos y que permitió a Green Bay irse arriba 7-0 con touchdown en carrera de una yarda de Lacy.

Los Osos comenzaron a capitalizar su dominio defensivo al provocar en el segundo cuarto un balón suelto de Lacy que preparó el pase de touchdown de Jay Cutler a Zach Miller de tres yardas que empató el duelo.

Otra vez la posición de campo, ahora gracias al regreso de 64 yardas de la patada de kickoff de J Janis hasta la yarda 33 de Chicago le permitió a Green Bay responder con un gol de campo para retomar la ventaja.

Pero limitar el daño a tres puntos fue la demostración de músculo de la defensiva de los Osos ante Rodgers y compañía.

Cutler comandó una serie en la que Jeremy Langford anotó en carrera de una yarda para poner 14-10 arriba a Chicago con 30 segundos por jugar en el primer medio. El contraataque de Rodgers le permitió a Green Bay anotar otro gol de campo con sólo cuatro segundos en el reloj.

Pero fue todo lo que los Osos permitieron a la defensiva y lo único que su ofensiva necesitó para poner tres puntos más por conducto del gol de campo de 21 yardas de Robbie Gould al inicio del último periodo.

Green Bay pudo remontar, pero al más puro estilo de Favre, quien ostenta la infame marca de más intercepciones en la historia de la NFL (336), Rodgers fue interceptado por Porter con 3:19 por jugar.

Irónicamente, Porter fue el mismo defensivo profundo que interceptó a Favre en la Final de la NFC entre Minnesota y Nueva Orleans en la campaña de 2009

Pese a provocar que Green Bay se quedara sin tiempos fuera, Cutler no pudo darle a Chicago el primero y 10 que le asegurara el triunfo sin mayores aspavientos.

Con 2:45 en el reloj, Rodgers tuvo el ovoide en sus manos y llevó a Green Bay hasta la yarda 8 de los Osos con 29 segundos, pero cuatro pases incompletos, incluido uno que James Jones no pudo asegurar en tercera oportunidad dentro de las diagonales, sellaron el triunfo de Chicago.

Rodgers no es un quarterback que se caracterice por remontar marcadores adversos, lo ha hecho, pero no es su fuerte y emular a Favre, quien logró 45 en su carrera, no es sencillo.