El Barça logra una victoria de prestigio en el Infierno del Norte

El nuevo proyecto del Barcelona Lassa dio muestras de su crecimiento al ganar en el 'infierno del norte', la complicada pista del Flensburg alemán (27-28), un triunfo que le permite liderar en solitario el grupo A, el considerado 'grupo de la muerte' de la máxima competición continental.

El equipo de Xavi Pascual, sin Entrerríos ni Valero Rivera, superó a un durísimo rival, líder de la Bundesliga, en un partido en el que las paradas de Bosko Ristovski y los goles de Wael Jallouz (8) marcaron la pauta.

Los catalanes llegaron a ganar con una máxima diferencia de cuatro goles en el inicio del segundo tiempo (17-21), pero una exclusión de Viran Morros y la aparición en escena de Holger Glandorf (6 tantos en los 30 minutos que jugó) le dieron una vida extra a los alemanes que tuvieron opciones hasta el final.

Cimentados en la calidad de Ristovski, el portero macedonio que hoy jugó de titular en el puesto de Gonzalo Pérez de Vargas, el Barcelona fue creciendo con el paso de los minutos ante un rival eléctrico que basó su juego en los lanzamientos desde el extremo y en las transiciones ataque-defensa.

La primera mitad fue para los porteros. Ristovski y el local Mattias Andersson brillaron ante unos ataques poco resolutivos. Tras un tanteo inicial (3-3), el Barça abrió hueco con el trabajo de sus lanzadores.

Lazarov, Jicha y Jallouz (con dos tantos cada uno) abrieron brecha y los de Xavi Pascual se escaparon mínimamente en el marcador (4-6).

Los alemanes, bien dirigidos por Mogensen y con el infalible Anders Egger como estilete, equilibraron el partido y con un parcial 3-0 se pusieron por delante (7-6, min. 16), aprovechando que el Barça se había quedado diez minutos sin anotar.

Reaccionaron los blaugrana en la segunda parte del primer tiempo. Ante la ausencia de Entrerríos, tomó la batuta Lasse Andersson, pero el partido no se rompió hasta los últimos cuatro minutos (10-10).

Desde la defensa, el Barça robó un par de balones en anticipación y pudo correr, faceta en la que Ariño destacó. Al término del primer tiempo, los azulgrana ganaban por dos goles (11-13) y seis jugadores habían anotado dos tantos en una demostración del juego coral del campeón español.

En la salida del segundo tiempo, el Barça tenía el partido muy controlado. Se escapó con cuatro goles de diferencia (17-21), pero una expulsión de Morros le dio alas a los alemanes.

Apareció entonces el cañonero Glandorf, que jugó solo la segunda mitad, y su equipo consiguió un parcial 3-0 para situarse a un solo gol (20-21).

El equipo de Ljubomir Vranjes apretó en defensa, Mattias Andersson empezó a parar más y el partido se equilibró (23-23), pero una nueva exclusión, esta vez del local Mahé, fue determinante para la suerte del partido.

Consiguió el Barça un parcial 0-3 y a diez minutos para el final, el partido estaba del lado azulgrana (23-26), pero costó mucho decantarlo para los catalanes.

En un duelo de pistoleros entre Glandorf y Jallouz, acompañados por la aparición puntual de Andersson y Ristovski, el tunecino salió ganador.

Con 26-27, un robo de Ariño permitió una contra y un tanto de Víctor Tomás (26-28). Descontó Toft Hansen (27-28), Lazarov no pudo decidir y en el último ataque Mogensen falló un pase y los azulgrana se aseguraron el triunfo.