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NFL Combine 2017

John Ross se queda sin isla por calzar Nike en vez de Adidas

El receptor de la universidad de Washington paró el crono en 4.22 en la prueba de las 40 yardas y acabó con el reinado del corredor Chris Johnson.

Actualizado a
INDIANAPOLIS, IN - MARCH 04: Wide receiver John Ross of Washington runs the 40-yard dash in an unofficial record time of 4.22 seconds during day four of the NFL Combine at Lucas Oil Stadium on March 4, 2017 in Indianapolis, Indiana.   Joe Robbins/Getty Images/AFP
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Joe RobbinsAFP

Pocas veces una elección de calzado ha costado tanto. Pocas veces ha costado nada menos que una isla. Tal cual suena.

John Ross, receptor de la universidad de Washington, ha batido el récord de velocidad de la prueba de las 40 yardas en la Combine de la NFL. Los chicos que se presentan al draft llevan todo el fin de semana recluidos en el Indianapolis pasando test físicos y psicológicos. De entre todos ellos el más popular, que no el más importante o interesante, es la medición de esas 40 yardas.

El récord lo estableció Chris Johnson en el año 2008, cuando paró el cronómetro en 4.24 segundos. Ross, aún con calambres y acabando lesionado, fijó la nueva mejor marca en 4.22.

Una isla para el récord

Pues bien, Adidas había prometido que si alguien era capaz de batir ese 4.24 le regalaría una isla. El problema es que en la letra pequeña de esa promesa estaba escrito que sólo lo haría si el atleta que lo consiguiera calzaba sus zapatillas. No es el caso de Ross, que usó Nike. El receptor no tiene contrato publicitario con ninguna de las dos compañías, por lo que la decisión fue sólo suya y, bueno, pues le ha costado una isla.

Pero mucho dinero en el futuro

Lo que sí se ha asegurado, o eso parece, John Ross es ser un jugador de primera ronda el próximo draft de la NFL. Y eso es un montón de dinero, algo que seguro que le alivia del disgusto que se habrá llevado por quedarse sin tan paradisiaco regalo.

Aunque, como en la fábula de la zorra y las uvas, el chico ya se ha encargado de dejar claro que ni sabe nadar muy bien ni tiene un barco, por lo que la ínsula, fuese o no de Barataria, no era reino que le importase.

John Ross, no perdamos de vista lo relevante, es uno de los mejores receptores de esta clase. Llegaba a la Combine considerado entre los cuatro principales y no son pocos los que opinan que aspira a ser el mejor de todos ellos.

En su carrera en Washington ha dejado muy claro que es más que velocidad pura, pues tiene juego de pies y manos capaces de hacerle ser élite en el futuro, o al menos eso es lo que se intuye. Que haya conseguido esta barbaridad de tiempo no significa nada por sí mismo, pero sí que es una muesca más que añadir a su curriculum y algo que le ayudará a ser visto aún con mejores ojos.

De la lista de los grandes corredores de la Combine a lo largo de la historia es difícil sacar conclusión alguna de su desempeño en la NFL. Salvo Chris Johnson, con una muy digna carrera, el resto no han sido gran cosa. No parece el caso de Ross pues su punta de velocidad va acompañada de otras muchas virtudes, aunque, quizás, no la del don de la oportunidad, ese que le hubiese hecho calzarse unas Adidas ayer y le hubiese valido nada menos que una isla.