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Atletismo

Eligen Monza para bajar de dos horas en la maratón

Considera que la pista de automovilismo cumple los requisitos idóneos para el intento de Eliud Kipchoge, Lelisa Desisa y Zersenay Tadese,

Actualizado a
Eliud Kipchoge.

La marca Nike ha apostado a fondo por el proyecto Nike Breaking2, con tres de los fondistas que lleva la firma, Eliud Kipchoge, Lelisa Desisa y Zersenay Tadese, con uno de los objetivos más atrevidos del atletismo: derribar la barrera de las dos horas, en la maratón.

De entrada, para preparar la carrera se ha cambiado el enfoque sobre la ubicación, pasando del recorrido tradicional por la ciudad, a un icono de la velocidad: una pista de automovilismo.
Determinar la ubicación ideal de la carrera precisa de un conjunto único de características medioambientales, que tienen en cuenta la altitud, la temperatura y la presión del vapor para optimizar las condiciones. Y, desde esta perspectiva se considera que el  Autodromo Nazionale Monza, a las afueras de Monza (Italia), es el lugar idóneo por disponer de un circuito fijo de 2,4 kilómetros.

El recorrido cumple con los básicos medioambientales. La temperatura ronda los 12 ºC y la presión de vapor es inferior a 12 mmHg. Además, el cielo suele estar cubierto, lo que minimiza la carga térmica de los atletas, y las corrientes de aire no muestran cambios de dirección drásticos: gracias a que el recorrido está perfectamente situado en el interior y rodeado de arbolado.

La distribución del circuito, longitud del recorrido y elevación cumplen con otros de los criterios básicos para optimizar el intento:
Asfalto: La superficie de calzada preferida, con la que el circuito de Monza también garantiza consistencia bajo los pies.
Zonas de peralte: La falta de desniveles del recorrido proporciona un grado de inclinación claro y liso a lo largo de todo el circuito.
Distancia: Con 2,4 km, el recorrido permite una gestión perfecta del ritmo, la hidratación, la nutrición y las transiciones del equipo de apoyo.
Temperatura: Un análisis climatológico de Monza de los seis últimos años, con una exploración comparativa de las condiciones del maratón más rápido de la historia confirmaron el potencial de la ubicación para un rendimiento óptimo.