Si Cristiano dice que él no lo haría así...

El Madrid fichó ayer a Chicharito con sordina. Un acto de firma, ninguna convocatoria de público, nada parecido a esas presentaciones coruscantes a que estamos acostumbrados. Chicharito es un buen delantero, sí, pero resulta corto para las aspiraciones del Madrid de estos tiempos. Los mal pensados que sospechen que todo consiste en crear un aura de protección en torno a Benzema, de eliminarle cualquier competencia seria, tienen argumentos. Se fue Higuaín, se fue Morata... Y ahora resulta que el Manchester United ficha a Falcao y en el mismo día cede al Madrid a Chicharito.

Benzema tendrá que justificar algún día tanta protección. Lleva, en números gruesos, dos goles en los diecisiete últimos partidos. Puede parecer una cuenta ventajista, y quizá lo sea, porque ese no es su promedio. Pero es inevitable asociar su figura rosada y melancólica en Anoeta al Madrid de estas fechas, partido por el eje por mor de las ventoleras florentinianas. Y este quite ‘in extremis’ del fichaje de Chicharito no parece convencer ni al propio club. No se abrieron las puertas del campo para aclamarle. Benzema puede estar tranquilo. El hombre a su sombra llegó sin focos que le iluminen.

A Cristiano se le escapó ayer que si él mandase no haría las cosas así. No se refería, seguro, a lo de Chicharito en concreto, sino a todo este ‘totum revolutum’ que ha deshecho el equipo de la Décima. Un equipo organizado sobre la marcha por Ancelotti, y que alcanzó el título con la pértiga de los diecisiete goles marcados por el genial delantero portugués, récord de largo en la Champions. Cristiano sabe lo que cuesta marcar tantos goles y ganar ese título, así que no es de extrañar que se sienta aturdido por esta convulsión que lleva a unos y trae a otros. Por eso dice con sencillez que él no lo haría así.