La reinserción del dopado

Hace un par de días recibí un mensaje de una persona vinculada al atletismo, que me advertía de que Raúl Chapado continúa con las mismas “tibiezas” que José María Odriozola en los asuntos antidopaje. No es el primer comentario que me ha llegado al respecto. Todo viene al hilo de la alineación que sacará este domingo España en los Mundiales de cross, en la que tres de los cinco integrantes han tenido alguna relación con casos de dopaje. Adel Mechaal, reciente campeón de Europa indoor de 3.000, está corriendo con una cautelar a la espera de que el TAS decida sobre sus tres incomparecencias. Ricardo Serrano fue detenido en 2013 en la Operación Gym-Sin por tráfico de sustancias, si bien después se sobreseyó la causa. Y Sergio Sánchez ha cubierto dos años de suspensión por un positivo con EPO.

El caso de Sánchez tiene más aristas, porque sí fue excluido de los últimos Europeos, pese a cumplir los requisitos. Ramón Cid, director técnico de la RFEA, reveló en AS que el leonés tenía en ese momento un expediente abierto por hacer un corte de mangas en Soria. Ahora apoya el cambio de criterio en que Sergio ha mejorado su actitud: “Todo el mundo tiene derecho a la reinserción”. En otro deporte castigado por el dopaje como el ciclismo, los dos ases españoles, Alejandro Valverde y Alberto Contador, compiten sin cargas y con aplausos, tras haber cumplido sanciones. Si se aceptan estos casos como justos, sería hipócrita señalar a un atleta por lo mismo. También entiendo que haya gente que se sienta incómoda al lado de deportistas que hicieron trampas. Pero si el derecho no se lo impide, en su derecho están.