Ferrerazo

Tenis | Masters masculino

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Ferrero batió a Kuerten, número 1 del mundo, en un partido fantástico. Esta mañana luchará con Ivanisevic (8:30, La 2) por un puesto en las semifinales.

Me imagino a los traumas como al portero de una discoteca: altos y huecos, aparentemente infranqueables. Basta chocar un par de veces con su brazo (de mar) para volverse inseguro, pequeño, calcetines blancos y zapatillas Paredes.

Ferrero superó ayer un complejo. Hay triunfos que no se agotan al levantar los brazos. Sucede igual con algunas derrotas, que siguen zumbando en la cabeza tiempo después. Ferrero logró ante Kuerten una victoria especial; justo en ese momento dejó de oír un zumbido y entró en una discoteca.

El número 1 del mundo perdió el partido, sus opciones de entrar en semifinales y prácticamente se despide de terminar otro año en cabeza del ránking. A Hewitt le basta meterse en la final (y va como un tiro) para ser el nuevo líder. Como se ve, Ferrero ganó mucho y destrozó otro tanto. La revancha está programada en París, Roland Garros, donde el brasileño ha dejado al español dos años seguidos fuera de la final. Saldrá fuego.

En su partido ante Kuerten, Ferrero consiguió, por fin, cuadrar el círculo de la tierra batida en la pista rápida. No es fácil, aunque se trata de un ajuste de apenas 10 centímetros. Lejos de la arcilla las pistas parecen más pequeñas y los golpes se escapan. Pero ya no nos caemos por el precipicio.

Hay más. El mosquito de Onteniente descubrió un saque demoledor, lo único que le faltaba para convertirse en un campeón entero. Lo demás lo tiene, una derecha salvaje y un revés que se hace matrix cuando salta y se precipita en el aire sobre la bola.

El encuentro de ayer duró menos que un psicoanálisis y fue más efectivo. Ferrero tuvo la oportunidad de ponerse 5-1, pero lo que parecía un paseo militar se convirtió en una muerte súbita. Allí estaba todo en juego, el set, el partido, el miedo y el portero de discoteca. Y Kuerten perdió. El resto fue una canción (Viva la gente, la hay donde quiera que vas).

Ivanisevic es el único obstáculo camino de las semifinales. Perdió ayer ante Kafelnikov por 6-3 y 6-4 y por lo tanto, también se lo juega todo en el partido de hoy. Contará con el apoyo de la colonia croata que reside en Sydney (unos 100.000) y con el mismo saque-volea que le hizo campeón en Wimbledon cuando parecía más acabado que Marujita. No hay que olvidar que acudió a Londres por una invitación y se ha presentado en Sydney del mismo modo.

Pese a todo, si Ferrero juega como ayer, ganará. En semifinales le espera Hewitt. También están clasificados Kafelnikov y Grosjean, que ayer se ventiló a papá Agassi (6-3 y 6-4). Ya no hay traumas. Sólo queda entrar por la puerta y hacerse el amo de la pista. Y con calcetines blancos.