Piterman es el propietario del CF Palamós, equipo catalán de Segunda B. Junto a Chuchi Cos, ex jugador del club, ejerce además como entrenador: "Una vez me convencí de que los entrenadores no me convencen, y mantenga esa redundancia". Piterman asegura que en el Racing también podría repetirse la fórmula si fuese necesario. Lleva cuatro años al frente de este club (el más antiguo del fútbol catalán). No tenía aquel Palamós presidente, ni entrenador, ni apenas jugadores. Estaba en Tercera y en tres años lo ascendió.

Nacionalizado estadounidense a finales de los 70, Piterman fue un cotizado saltador de longitud y triple que compitió para formar parte del equipo olímpico yanqui en los Juegos de Barcelona, pero no lo consiguió. Con negocios inmobiliarios de Estados Unidos y España, es dueño también de un hotel en Palamós en el que se alojan los jugadores del equipo que no viven en la localidad. En 1989 llegó a España y, tras recorrerla con su familia, se instaló en esta población de la Costa Brava donde, además de sus negocios, pudo hacer realidad uno de sus sueños: comprar un equipo y gestionarlo a su imagen y semejanza. Esta campaña casi dio una gran sorpresa en la Copa, cuando llegó a dominar al Betis por 3-1 en Palamós.