Esta tarde comienza en Twickenham el Torneo 6 Naciones con el mejor partido posible: Inglaterra-Francia. Se trata de conocer cuál es el país que practica el mejor rugby en el hemisferio norte. Hasta finales de los 90 eran 5 naciones: los tres países británicos (Inglaterra, Gales y Escocia), Irlanda y Francia. En el año 2000 entró en el torneo Italia rompiendo una tradición de casi un siglo.
Pero esta intrusión ha roto más cosas. El rugby fue hasta finales de los años 90 el último reducto del deporte puramente concebido como tal. Se jugaba cada dos fines de semana y los horarios eran diferentes dependiendo en qué país se jugara. El deporte estaba por encima de todo, de intereses televisivos, de intereses comerciales. Pero el rugby también cedió al dinero del márketing y de las televisiones y hoy este torneo es un negocio igual que el resto de competiciones deportivas. Por eso hablamos de 6 y no de 5 Naciones.
Pero lo que no ha podido quitarle el paso del tiempo al Torneo es su magia. Una magia especial que comienza todos los años con el frío del mes de febrero y que moviliza a todos los amantes del deporte más sincero. Es una forma de expresión de las sociedades de los países que juegan. Así, Inglaterra representa a la alta sociedad británica. Gales, a la clase trabajadora y a la gente humilde. Escocia es el odio hacia lo inglés. Irlanda, una forma de medir sus fuerzas como nación contra sus vecinos británicos. Y Francia es el gallito del grupo que piensa que es superior a sus rivales de las islas al practicar un rugby muy diferente. Italia todavía no sé qué representa.
Inglaterra y Francia abren la edición de este año. Son los dos favoritos para ganar el Grand Slam. Los galos fueron los últimos en conquistarlo y los máximos favoritos. Los jugadores a tener en cuenta son el medio melé Fabien Galthié, nombrado como el mejor jugador del año pasado y uno de los veteranos del torneo. El equipo de Bernard Laporte cuenta con una tercera línea impresionante formada por Olivier Magne, Serge Betsen y el vasco-francés Imanol Harinordoquy, que tendrá un recibimiento hostil en La Catedral del rugby al llamar "arrogantes y chauvinistas" a los ingleses. En Inglaterra, el pilier Jason Leonard jugará su partido número cien con la camiseta de la rosa y estará dirigida por la pareja Jonny Wilkinson y Matt Dowson. El resto lo pondrán los 80.000 espectadores que abarrotarán La Catedral.
En Roma juegan Italia y Gales, los más flojos del Torneo que lucharán por evitar la Cuchara de madera, y en Edimburgo, Escocia e Irlanda. Estos sólo aspiran a ganar a Inglaterra porque, como dijo el escocés Jim Calder: "Ganar a Francia es un placer, ganar a Inglaterra es un deber".
