Caparrós examina el efecto Clemente

Partido bravo se adivina en Nervión, que no viene de nervios pero lo parece. Al Sevilla lo desquiciaron en San Mamés; al Espanyol se desquició a sí mismo contra el Barça. Veintiséis puntos contra veintidós a favor de los locales a estas alturas, los tres de esta tarde tienen un valor incalculable.

Para el Espanyol seguramente más. Está peor y perder lo asomaría al abismo. Caparrós pone a prueba el efecto Clemente, balsámico de entrada, zarandeado en el derby. Los números son descaradamente blancos a priori: el vasco nunca ganó en el Pizjuán (once visitas, tres empates), ni el Espanyol al Sevilla desde que volvió a Primera: 2-3 y 3-0 el año pasado y, este curso, 0-0 en Montjuïc, en la primera vuelta.

El partido huele a eso, a 0-0, a pocos goles. Clemente mediante y fuera de casa, ya se sabe. Hay pruebas. Las dos últimas salidas del Espanyol se saldaron con empates sin goles en Villarreal y Anoeta, meritoria ésta, pues se trata del campo del líder. El Sevilla lleva 17 goles a favor, 20 menos que el último ejercicio a estas alturas, pues andaba en los 37.

Caparrós se subirá a lomos del gran Reyes y de Toedtli, aquel que dinamitó el Camp Nou, pues el Sevilla ganó allí por 0-3, para caer sobre Toni Jiménez. Clemente vuelve a juntar a Tamudo con Milosevic, cuya separación de salida en el último Espanyol-Barcelona fue magnífica para los azulgrana. También al doble pivote (Morales se juntará con Domoraud en detrimento de De la Peña) y al espíritu pre-derby. Los pericos se presentan con su equipo más fiable a la luz de los resultados, con el único cambio de Amaya por el sancionado Lopo. Amaya tiene cuerpo de jota y no tuvo reparos en anunciar que si el Sevilla da patadas, "nosotros daremos más".

Entra en la lista andaluza el defensa brasileño Daniel Alves, que recibió ya su pase internacional, y podría jugar puesto que las sanciones a David y Redondo merman su potencial en retaguardia. Para el Sevilla, por más que su entrenador quiera disimularlo, el partido es clave: acabarlo con casi 30 puntos sería un guiño a la permanencia. Nervión, cinco de la tarde. Como si fuera La Maestranza.

Rincón estadístico

El Sevilla no gana en el Sánchez Pizjuán desde el 10 de noviembre, cuando venció por 1-0 al Racing. Aun así, por el camino superó por 3-0 al Mallorca en el destierro de Cádiz.

El Espanyol es el equipo que más partidos de Liga ha perdido en Nervión (39). Sólo ha logrado seis victorias, la última en 1999.

El conjunto blanquiazul sólo ha sumado cinco puntos como visitante. Una victoria en Málaga y dos empates en Villarreal y Anoeta.

El Sevilla no ha caído aún con Pérez Burrull.