Tengo que reconocer que me gustan más bien poco las cronos por equipos. Y eso que tenemos en un equipo español, ONCE, un valor sólido para ganar la etapa, como lo hiciera el pasado año. El objetivo: vestir a Joseba Beloki de amarillo. Sin embargo, este año el conjunto de Manolo Saiz echará en falta a dos hombres: Igor González de Galdeano y el ya retirado Olano. Aunque han sido reemplazados por dos corredores de lujo: Ángel Vicioso y René Andrle, todas las fuerzas serán pocas para hacer frente a equipos como el US Postal de Lance Armstrong, el Telekom, el Crédit Agricole o el Bianchi de Jan Ullrich. Por cierto, qué bien se lo ha montado el equipo alemán Bianchi.

Hay que ver qué listos son los extranjeros! Con cuatro corredores de los nuestros han hecho una formación de lujo con Casero, García Casas, Garmendia y Plaza. Y hoy estarán cerca de la victoria... Volviendo a mi animadversión por las cronos colectivas —y más cuando son tan largas (70 kilómetros la de hoy)—, pienso que exigen mucho a los equipos y que esto crea desventajas. Porque el corredor depende más del equipo que de sí mismo. Aunque el año pasado nos fuera bien porque Beloki fue segundo gracias al tiempo que ganó la ONCE en esta etapa, a menudo perjudica a grandes corredores. Y esto no es del todo justo.