Las chicas del voley: Triunfos televisados

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Las chicas del voley: Triunfos televisados

Las chicas del voley: Triunfos televisados

El Espanyol acercó el voleibol femenino al gran público. Era el principal enemigo a batir en Liga. TV3 retransmitió en directo muchos de sus partidos

La andadura profesional del equipo de voleibol femenino empezó en 1982. No era la primera sección femenina con la que contaba el club. Zambulléndonos en la historia perica, aparecen otras dos: de atletismo y baloncesto, que datan de los años 40. Actualmente, sin embargo, la única sección integrada por mujeres que permanece en marcha es la de fútbol.

El equipo de voleibol se formó a partir de la absorción del Cornellà, un club que acababa de proclamarse campeón de España, pero que aún así tenía serias dificultades económicas para seguir adelante y se puso en venta. La primera temporada, de hecho, el nombre fue todavía un híbrido: Cornellà-Espanyol.

Ese aura de campeón que el conjunto traía de atrás, impregnó la sección desde un principio. La calidad de las jugadoras se impuso rápidamente en las pistas. En diez años de actividad, ganaron ocho títulos nacionales: tres Ligas (1984-85, 1987-88, 1990-91) y cinco Copas de la Reina, tres de ellas consecutivas, motivo por el cual el club se pudo quedar una en propiedad. El buen nivel demostrado año tras año en la liga regular, donde el Espanyol era uno de los máximos rivales a batir, le permitió también proyectarse hacia Europa. Las españolistas enriquecieron su currículum deportivo participando en una Copa Federación Europea, una Recopa y dos Copas de Europa.

La popularidad del equipo fue aumentando y, poco a poco, logró la fidelidad de cierto público en el Palau Municipal d'Esports de Montjuïc. Se convirtió en un referente para el voleibol femenino catalán, tanto en lo que atañía al primer equipo como en el trabajo de cantera. Y en cierto modo, ejerció de pionero. Por ejemplo: en materia de fichajes. No era algo usual entonces y menos en una disciplina minoritaria, como el voleibol, y en categoría femenina. Pero se realizaron refuerzos importantes, como el de Cecilia del Risco, capitana de la selección de Perú en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. O el de Sylvie Hernández, una de las mejores jugadoras nacionales, que militaba en el gran rival: el Hispano Francés. También vinieron diversos entrenadores de prestigio, como el argentino con nombre de literato ilustre Víctor Hugo, el búlgaro Emil Trenev o el sueco Thomas Hosck. Es decir, que realmente había un interés por parte de la directiva para que el equipo se mantuviera temporada tras temporada en primera línea.

La sección de voleibol jugó un papel decisivo para la autoestima perica en los años más tristes de su fútbol. En la temporada 1989-90, por ejemplo, cuando en Sarrià sólo podían verse encuentros de Segunda División, las chicas del voley conquistaron una Copa de la Reina. TV3 retransmitía muchos de sus partidos en directo y, poco a poco, el gran público fue familiarizándose con bloqueos, fintas, remates y saques chinos.

El idilio duró hasta la temporada 1993-94, con Daniel Sánchez Llibre en la presidencia. A partir de ahí, sólo se mantuvo la cantera, que estaba plagada de promesas y apenas acarreaba gastos. El primer equipo recibió una ayuda de un millón de pesetas para facilitar su continuidad, aunque fuera lejos de Montjuïc y con otros colores. Así fue como se fundó el Club Voleibol Barcelona, que hoy en día, como si se tratara de una maldición cíclica, también atraviesa un momento económico delicado. Quizá recuperándolo como sección, el Espanyol podría subsanar una pérdida histórica.

Un equipo que dejó huella

Además del respeto de sus rivales, las chicas del voley se ganaron el cariño de la ciudad en muy poco tiempo. Marta Galcerán (en la foto) era una de las jugadoras más carismáticas, ya que entró en el club el mismo año de su fundación y permaneció en él más de una década luciendo el brazalete de capitana. Fue una época muy intensa, ya que prácticamente todos los ejercicios se cerraron con superávit deportivo, es decir, con un nuevo trofeo que añadir a las vitrinas. El día del Centenario no podían faltar. Recibieron el homenaje de todos los socios y dieron una emotiva vuelta de honor al Estadi Olímpic de Montjuïc, junto con el resto de secciones. El Espanyol tiene ahora una oportunidad inmejorable para recuperarla.