Ha jugado todo el partidillo. ¿Cómo se ha visto?

Para ser el primer encuentro después de tanto tiempo me he sentido bastante cómodo y lo importante es que con el balón en los pies no he tenido miedo por la rodilla. Me he encontrado como cabía esperar y espero que todo vaya bien durante estos días.

¿Tan bien como para jugar ante el Valencia?

Hay que ser sincero y debo decir que no estoy al cien por cien. Pienso que en estos días de entrenamiento iré cogiendo ese toquecito final que me puede faltar. Pero me siento cómodo y como para poder entrar en la convocatoria, aunque esa es una decisión del técnico y tendré que acatarla.

Ha jugado todos los minutos en el doble pivote. ¿Cómo se desenvuelve en esa zona?

Es mi puesto. Puedo jugar de mediocentro o de mediapunta. Siempre me he desenvuelto en esa posición y me encuentro bien ahí, ya que es lo que hago desde que empecé a jugar al fútbol.

Lleva dos años con el primer equipo y aún no ha debutado. ¿Está gafado?

No tanto como eso, pero cuando uno está tanto tiempo lesionado y ve que hay problemas en la zona donde uno juega y que el técnico da tantas oportunidades, se hace un poco duro.

¿Cuántas veces ha soñado con el día de su estreno?

Llevo mucho tiempo pensando en eso. Espero que pronto porque sería el hombre más feliz del mundo. Colgaré todos lo que salga en los periódicos, para mirarlo cuando sea un jugador más veterano.

¿Le presiona que muchos le vean como panacea para el mediocentro?

¡Qué va! Los futbolistas sabemos a lo que nos sometemos. Que la gente se acuerde de mí estando lesionado es un orgullo. Demostraré que no les defraudaré