Lujo de derby

Primera | Sevilla 2 - Betis 2

Lujo de derby

Lujo de derby

Morenatti

El Sevilla se adelantó primero y el Betis le replicó con dos goles; partidazo de Joaquín, Reyes y golazo de Antoñito

El derby, aunque al final se liaron a tortazos Javi Navarro y Juanito (¿a qué jugaban?), fue de paz. Pero nos quedamos por encima de todo con el fútbol, con los chispazos que nos regalaron Sevilla y Betis. Fútbol de smoking, de Joaquín, de Reyes, de Tote... y de Antoñito. No ganó nadie, aunque pudieron llevarse los dos la victoria. Nadie salió disgustado, ni béticos ni sevillistas. Ganó Sevilla.

Y es que el fútbol por momentos se volvió eléctrico, entraban todos y defendían todos. De pronto veíamos a Joaquín tratando de perforar por su derecha y dos minutos más tarde defendiendo con uñas la trinchera bética o ayudando a Denilson por la zurda. De pronto Reyes andaba mostrándole la matrícula a Varela a base de velocidad como relevando a David en el marrón de neutralizar a Joaquín. Máxima intensidad no podía caber más en Nervión, con un Betis tratando de imponer su ley en el centro del campo (Assunçao, Arzu, Capi, más las ayudas de Joaquín y Tote) y un Sevilla amurallado en el centro, con un tridente (Baptista, Martí, Casquero) que en el último momento se sacó de la manga Caparrós y que sorprendió al principio a su colega Víctor. En medio de aquella selva de pasiones, el fútbol se atrevió a aparecer por minutos y nos ofreció detalles maravillosos, como aquella cesión con la cabeza de Darío a Germán Hornos ('toma, paisano: métela tú...') para que su compatriota apretase el gatillo y lanzase fuera; o una carrera de Joaquín dejando atrás a David, Casquero, Reyes y a... Lopera; o un monumental gorro de Julio Baptista sobre Luis Fernández, para matar el cuero con el muslo y sin caer central, suave, sobre la posición de Hornos; o un latigazo de Reyes, dejando aburrido a Varela y enviando sobre Hornos para que el charrúa (incansable y doloroso como un forúnculo, según Juanito...) enviase una volea perdedora cuando media Sevilla cantaba gol.

La segunda mitad, cuando creíamos que el fútbol podía decrecer para dar paso a lo físico, se encendió la luz. Fueron varios chispazos. Un pase en profundidad de Baptista, carrera de Daniel, centro de éste y Reyes voló para golpear con el izquierdo a gol. Aquello enfadó al Betis, que se vino arriba y le hizo dos goles al Sevilla, al que metió el miedo y dejó groggy. Dando vaivenes y con despistes andaban los blancos, cuando salió Antoñito. El del Polígono encaró dos veces a Contreras y en una de ellas se la puso imposible. Gol de bandera, como de bandera fue la noche. Lujo de derby, donde hubo de todos (patadas en las áreas, penaltis que pudieron serlo, adrenalina por las nubes...), hasta fútbol. El Betis le arañó un empate al rival, lo mismo que el Sevilla. Pudieron ganar los dos. Pero ganó Sevilla.

Primer gol al Betis de Reyes

El internacional José Antonio Reyes marcó el primer gol de su carrera al Betis. Fue el primer tanto de los sevillistas, de muy bonita factura: Daniel Alves colocó el centro y el de Utrera voló para empalmar el balón y alojarlo en el fondo de la red. La otra perla de la cantera sevillista, el delantero Antoñito, marcó el segundo gol de remate cruzado.