Puskas tumbó con una finta a Wright

Puskas fue uno de los principales culpables de la humillación a Inglaterra en su hasta entonces virgen Wembley. Los 123.000 espectadores que abarrotaban el campo debieron enmudecer cuando Puskas llegó hasta el borde del área chica, pisó el balón con su pie izquierdo, se lo enseñó a Billy Wright para que intentase arrebatárselo, lo escondió y lo volvió a sacar para batir a Merrick de un gran zurdazo. La jugada la relató muchos años después el propio cañoncito en la serie televisiva El Partido del Siglo. "Mira ese chico gordito, iremos a por él", había dicho antes del partido un confiado jugador inglés. Luego vendría lo que describió en su crónica del Times Geoffrey Green: "Wright fue a por él como un bombero que se lanza sobre el fuego equivocado (...). Inglaterra se encontró extraña, en un mundo raro".