Puyol confiesa a los suyos que jugará

Puyol confiesa a los suyos que jugará

Ayer se entrenó suavemente y hoy forzará la máquina

"Estoy bien, me veo jugando". Carles Puyol está deseando recuperarse a tiempo de la elongación muscular que padece para no perderse el clásico del domingo. Ayer soltó esa frase a personas de su confi anza después de un suave entrenamiento en solitario, en el que tomó contacto con la pelota por primera vez desde el domingo.

El defensa del Barça se lesionó los músculos isquiotibiales en el primer tiempo contra el Málaga (3-0), y el pronóstico de los médicos del club cifró su rehabilitación en un plazo no inferior a siete días. El tratamiento, que incluye fi sioterapia y un entrenamiento progresivo, depende de la tolerancia al dolor del jugador. Ayer, según dijo, se sintió bien, aunque la prueba de fuego la pasará hoy, cuando comience a forzar la máquina.

Para el entrenamiento matinal de este jueves, el doctor Lluís Tilha previsto que Puyol realice carreras con cambios de dirección y desplazamientos largos de balón, movimientos semejantes a los que podría ejecutar durante un partido. Si resiste la prueba, mañana se reincorporará al ensayo con el resto de la plantilla.

Los médicos del Barça insisten en la prudencia, aunque si el lunes veían muy justa la participación de Puyol, ayer ya valoraban en un 90 por ciento las opciones de que pueda estar en el Bernabéu.

El catalán busca su derby número nueve

A pesar de que tiene 26 años y hace relativamente poco que llegó al primer equipo del Barça, Carles Puyol ha jugado ya ocho partidos contra el Real Madrid desde que debutara. El saldo en estos encuentros le sale negativo, con una victoria, cuatro empates y tres derrotas.