Fernando Alonso (Renault) marcó ayer el séptimo mejor tiempo de la sesión de entrenamientos privados de Fórmula 1 que se disputó en Silverstone (Inglaterra), en la que el australiano Mark Webber (Jaguar) batió el récord oficioso de vuelta rápida en el circuito inglés. Webber cubrió, en la mejor de sus 116 vueltas, los 5.141 metros de la pista en un tiempo de un 1:17:638, 224 milésimas menos que el inglés Jenson Button (BAR-Honda), que dio 107 giros y logró el segundo mejor crono de la jornada.

El asturiano Alonso dio un total de cien vueltas para completar 514 kilómetros. Tanto su trabajo como el de Jarno Trulli se centró en probar la fiabilidad de la evolución del motor que utilizarán en los próximos grandes premios, con un resultado satisfactorio.