El catalán Isidro Oliveras de la Riva ha presentado este mediodía en Fresno (Estados Unidos) su dimisión irrevocable ante la asamblea de la FIRS, cargo de presidente que ocupará ahora el argentino Ernesto González Molina. Molina ha advertido además a las federaciones presentes de los "problemas legales" que podría sufrir la institución internacional si no reconduce la admisión de la Federación de Cataluña.

En una dilatada despedida ante los 47 federaciones que acudieron a la asamblea de la FIRS, donde Oliveras de la Riva se expresó en cinco idiomas (español, inglés, francés, italiano y portugués), el ya ex dirigente de la Federación Internacional de Patinaje dio un repaso a las últimas horas antes del congreso y las tensiones que se han producido, además de justificar su adiós.

Oliveras informó a la asamblea de que la decisión del comité central ayer jueves de revocar la candidatura de la Federación de Cataluña para ser admitida en la FIRS y que uno de sus miembros, cuyo nombre no quiso desvelar, aunque se le entendió todo (en alusión al italiano Sabatino Aracu), forzó la votación para revisar los acuerdos suscritos en Miami, y que daban a la Catalana la carta de naturaleza como miembro provisional.

El resultado de la votación de ayer fue de 6-3, con lo que la Federación de Cataluña perdía su condición de afiliado, aunque por la noche, la admisión de un recurso permitió que este organismo haya entrado en el orden del día de la asamblea, aunque nadie ha sabido explicar, ni incluso la organización, cómo se resolverá la 'cuestión catalana' ante los asambleístas.

"Mi postura la conocían todos sobradamente. No quise coaccionar a nadie y por eso me ausenté de la votación ayer, porque soy catalán y se podría entender que mi presencia podía condicionar el voto. Cataluña perdió y eso supuso también una derrota para el presidente de la FIRS. En términos políticos, las derrotas se pagan con responsabilidades y por eso dimito", señaló Oliveras de la Riva ante el auditorio. "Podría hacer el ridículo y sentarme a la mesa y pensar que no ha pasado nada. Pero tengo que irme con convicción", añadió el ya ex presidente de la FIRS.

En su última intervención, Oliveras de la Riva advirtió a los presentes de los problemas que les podría acarrear "la ley" y "los abogados" en el caso de que no reconsideran la 'cuestión catalana'. Animó a los presentes a ser valientes y reconducir la negativa del comité central para evitar que la cuestión la resuelva finalmente el Tribunal de Arbitraje del Deporte de Lausana (Suiza).

Cuando finalmente abandonó la sala, en medio de la asamblea, Oliveras de la Riva recibió el abrazo de todos los presentes, a excepción del alemán Harro Srucksberg (responsable de hockey patines) y de Sabatino Aracu (representante por Europa), quienes miraron hacia otra parte.