Mil personas recibieron en Madrid a la Selección

Mil personas recibieron en Madrid a la Selección

"Menos fútbol y más balonmano", cantaban las alrededor de mil personas que esperaron en Barajas la llegada de la Selección. De Alcobendas, de Valladolid, de León y, sobre todo, de Ciudad Real, los más ruidosos.

Tuvieron que esperar cerca de dos horas a que aparecieran sus héroes, que primero se presentaron en la sala de prensa como un grupo de amiguetes que venía de tomarse unas copas. Cosa exacta, por otro lado, y que Iker Romero no trataba de ocultar. "¿Qué cómo lo hemos celebrado?. Hemos bebido, bailado, bebido, bailado y todavía seguimos bebiendo".

Como saludo nos cantaron a los periodistas, en lengua árabe, la cantinela con que los tunecinos animaban a su selección. Y después un mensaje más claro: "Pastor, renovación".

Mateo Garralda apareció con varias pintadas en la camisa: "Soy el puto mono". Lo explicó Rocas: "El mono soy yo, que he sido el último en llegar al equipo. Pero en nuestra habitación apostamos que, si ganábamos, Mateo tenía que aparecer en Madrid con esas pintadas".