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Yo digo | Pedro Muñoz

Cualquier elección era la perfecta

Pedro Muñoz
Actualizado a

El equipo elegido por los capitanes españoles es el que tenemos y, por tanto, el mejor. Y no quiero que suene a discurso conformista, sino todo lo contrario. Desde hace tres años defiendo la tesis de que gozamos privilegiadamente de dos equipos, tenemos siete u ocho jugadores capaces de meterse en las semifinales de la Copa Davis. Podrían haber elegido a otros en lugar de a Nadal, Ferrero, Feliciano y Ferrer, y hubieran sido igualmente válidos. Arrese y Avendaño apuestan por Rafa y Feli para el dobles y por Juan Carlos como escudero de nuestro número en individuales. Para ello se han basado en su estado de forma durante 2005 y en la estrategia a seguir en la eliminatoria contra Italia. La elección de Ferrero por delante de David Ferrer obedece sin duda a una cuestión de veteranía, porque todos sabemos que el alicantino lleva una gran temporada.

Italia va a ser un rival durísimo, mucho más de lo que la gente se puede imaginar. Aunque he de sincerarme y decir que tengo mucha fe en el equipo. No es una cuestión de ser optimista, sino realista. Debemos ganar porque jugador por jugador somos superiores. Sin embargo, no será un camino de rosas. En Torre del Greco las gradas van a estar muy cerca de la pista y la afición italiana echará el aliento en la nuca de nuestros jugadores. Es cierto que Italia no presentará su equipo de gala y que la baja de Volandri es importantísima, pero la competitividad del deportista transalpino está sobradamente demostrada, más aún cuando defiende la elástica azzurra. Y que se juegue sobre tierra no debe engañarnos, no es una elección suicida, sino que en otra pista nuestra superioridad sería mayor. Todo reúne el morbo suficiente para disfrutar de una eliminatoria épica.