Nadal se impone a Federer en la Batalla de las superficies

Tenis | Exhibición

Nadal se impone a Federer en la Batalla de las superficies

Nadal se impone a Federer en la Batalla de las superficies

REUTERS

El manacorí vence al suizo por 7-5, 6-4, 7-6 en el partido de exhibición disputado sobre una pista mitad de tierra batida y mitad de hierba.

Rafael Nadal se impuso a Roger Federer (7-5, 6-4, 7-6 (10)) en la denominada 'Batalla de las superficies', el partido de exhibición que enfrentó en Palma de Mallorca a los dos mejores jugadores del mundo sobre una inédita pista construida para la ocasión mitad de hierba y mitad de tierra batida, confirmando su particular dominio sobre el cuatro veces campeón de Wimbledon.

El doble campeón de Roland Garros hizo valer la estadística que preside sus emparejamientos personales en partidos oficiales frente al indiscutible número uno del mundo, al que domina 7-3 tras el último triunfo del manacorí en la final del Masters Series de Montecarlo, en esta última ocasión sobre tierra.

El gran atractivo del partido estaba precisamente en comprobar la adaptación de cada tenista al trastorno del constante cambio en la forma de juego en superficies tan diferentes, en la que ambos son absolutos dominadores. Así Nadal se ha impuesto a su rival en el total de cinco ocasiones en las que se han enfrentado sobre tierra, mientras que Federer ha hecho lo propio sobre el único duelo en hierba.

Problemas con el césped

El encuentro se puso de largo una vez superados los problemas con el césped instalado en el Palma Arena sobre la mitad de la pista, que no estaba en condiciones de acoger el partido y que obligó a buscar e instalar nuevos paneles de hierba a toda velocidad para imitar a la hierba de Wimbledon que ofrecieron muy buen estado.

Los primeros juegos sirvieron a ambos para adaptarse a las superficies, aunque el español demostró que lo hizo antes que el suizo, como puso de manifiesto al romperle el servicio en el cuarto juego, cuando, además, Roger Federer servía sobre tierra batida y el español restaba en hierba.

El 3-1 dejaba claro que el manacorí tiene tomada la medida a Federer, al que vence en su duelo particular (7-3), aunque el suizo rápidamente se rehizo para devolverle el 'break' en el séptimo juego coincidiendo con él restando en tierra (4-3) y anotándose su servicio para establecer las tablas (4-4). Nadal no lo acusó y mostró su buen hacer para adelantarse de nuevo (6-5) y adjudicarse el primer set, rompiendo el servicio del suizo con un juego en blanco.

Cambios de cordaje y zapatillas

La segunda manga discurrió de forma diferente. Más asentados con el cambio de superficies, Federer y Nadal ofrecieron buenos intercambios de golpes más propios de la exhibición que ambos protagonizaban y el helvético, además, desplegó de inicio (0-2) un mejor, que confirmó con el 4-5 para sentenciar con un juego en blanco al servicio en tierra batida.

La atípica situación motivaba algunas diferencias respecto a un partido 'normal': los cambios de cordaje eran más frecuentes, los de zapatillas constantes, y el jugador que disputaba sus puntos sobre la hierba se mostraba en clara desventaja ante la rapidez y el bote más alto de la bola sobre el que lo hacía en tierra batida, con más tiempo para preparar los golpes y defenderse desde el fondo de la pista.

La manga definitiva se extendió hasta el 'tie-break' tras sendas rupturas de servicio consecutivas de cada uno de los jugadores sobre su rival, que supusieron el 3-1 y el 3-2, hasta que fue Nadal quien en logró imponerse por 12-10 en un emocionante final de partido para la alegría de los asistentes, que se volcaron con el tenista local.